En su reciente visita al Estado de Colima, el presidente Andrés Manuel López Obrador, hizo una promesa que vale la pena darle seguimiento permanente, pues dijo que su gobierno llevará a cabo la ampliación a 6 carriles de toda la carretera Colima a Manzanillo.
Aunque no dijo cuándo empieza, sí es una promesa alentadora, que como sociedad sabemos es fundamental que esta obra se realice, ya que desde hace cinco años aproximadamente se ha estado pidiendo su realización, porque ha aumentado el transporte de carga pesada y ha habido muchos accidentes, entre ellos la pérdida de vidas y es a consecuencia del incremento de vehículos, principalmente de carga pesada, que tienen como destino, el puerto de Manzanillo y; la infraestructura carretera ya no es suficiente.
Muchas familias colimenses, han perdido a sus seres queridos por accidentes en dicha carretera, los causantes han sido vehículos de carga pesada, como trailers con uno o dos remolques, en el que se les ha desprendido y han ocasionado la muerte de familias completas: como la ocurrida en el tramo los Asmoles-Tecolapa, una zona peligrosa de curvas, subidas y bajadas en este tramo carretero en el que hoy el presidente se compromete a ampliar y así, minimizar el riesgo.
En esta zona (entre los municipios de Colima y Tecomán) ha habido muchos accidentes fatales, el gobierno federal y estatal, han sido testigos de esta problemática que se tiene en el Estado de Colima; uno de los hechos horrendos e injustos de que se tiene memoria fue el que se documentó en la carpeta de investigación número NSJP/IX/CI/UNICA-61/2018, donde por la irresponsabilidad de un conductor de tráiler en esta zona de alto peligro y por exceso de velocidad, malas condiciones del automotor y ausencia de supervisión de autoridades en la forma como se conducen estos camiones, a uno de ellos se le desprendió un remolque, cayendo sobre un vehículo en el que viajaban 11 integrantes de una familia, muriendo 10 de ellos, eran familias de escasos recursos y todo un peregrinar en los tribunales para que después de varios años y con la complacencia de autoridades locales y federales, les dieran una reparación del daño indignante, en donde por falta de un buen sistema de procuración y de acceso de justicia para las víctimas, se tuvieron que conformar con medidas de reparación indignantes y en el que finalmente, los responsables y autoridades que no atendieron el caso, -pues duraron años sin hacer nada, más parecían coludidos con los responsables- no pagaron por su complicidad. (casos similares, muchos)
Fue un caso que en su momento cimbró a la sociedad colimense y en donde intervino la propia presidencia de la República, apoyando a las víctimas, pero no fue suficiente para hacer que los responsables pagaran por el daño cometido, finalmente hubo impunidad, pues nadie de los responsables fue procesado, salvo el conductor, aunque las familias recibieron cierto apoyo del propio presidente de la República y quizá por eso, consciente de toda la problemática que se tiene la entidad, por la falta de la ampliación carretera Colima-Manzanillo, el presidente se compromete a hacer esta obra.
La promesa del presidente, es sólo sobre un tramo carretero de 100 km, actualmente se cuenta con cuatro carriles, pero por la gran afluencia vehicular es insuficiente, aumentar dos, beneficiará mucho, además de disminuir en un alto índice los accidentes que hoy ocurren día a día y esto se traducirá en mayor seguridad de quienes por ahí transitan.
Igualmente, señaló el presidente que a finales de este año de Colima a Guadalajara ya estarán abiertos los seis carriles y esto sin duda también ayudará a agilizar el transporte, pero si no se hace la obra que promete de seis carriles hasta llegar a Manzanillo, seguirá el embotellamiento y riesgos para la población colimense por el transporte de carga pesada.
Colima necesita mejor conectividad de medios de transporte, entre ellas, la aérea, ya que hay una sola aerolínea que monopoliza el transporte de pasaje y solamente te lleva a la ciudad de México, muy cara, te obligan a trasladarte a Guadalajara por tierra para una mejor conectividad con el resto del país, si no puedes pagar el transporte aéreo en Colima y es donde te preguntas ¿por qué esta aerolínea es tan cara? Todo esto se debe revisar, además de volver a utilizar el transporte de mercancía por tren, ya tenemos la vía, ¿por qué no se sigue utilizando éste tipo de transporte? no necesariamente que sean trailers, pues éstos son muy peligrosos y en su gran mayoría no son vigilados por las autoridades federales y muchos de ellos no respetan las buenas prácticas de conducción y son un peligro para quienes transitan en carretera.
Por ello la promesa presidencial es muy buena, pero sería mejor y generaría más confianza que pusiera fecha de inicio y que la sociedad también estuviéramos al pendiente de que se vaya cumpliendo. Obras como ésta, también vale la pena poner atención.
Además, sabe que: hace algunos años era seguro viajar por la autopista Manzanillo-Guadalajara no había tanto trailers y por eso se pagaba una cuota de peaje, cara, pero valía la pena, decías, lo hago por seguridad. Ahora, sigo pagando la cuota cara, pero aumentó el riesgo de embotellamiento por accidente y lo peor, hasta la pérdida de vidas.
Por eso señor Presidente, es importante la obra que promete realizar en Colima, ojalá se inicie de inmediato y concluya antes de terminar su sexenio.