El Estado de Colima fue reconocido como tal, en la Constitución liberal de 1857; por ello, el 11 de marzo de cada año, se conmemora su erección, teniendo una relevancia histórica y política digna de difundir para garantizar el derecho humano a la historia.
Desde la constitución de 1824 el Estado de Colima, fue reconocido como territorio Federal, sin que oficialmente se le reconociera como Estado, previamente como provincia; véase su artículo 5.
Ya en la constitución de 1857 se reconoce como Estado de la nación: “SECCION II. De las partes integrantes de la Federación y del territorio nacional. ART. 43. Las partes integrantes de la federación son: los Estados de Aguascalientes, Colima, Chiapas, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, México, Michoacán, Nuevo León y Coahuila, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Valle de México, Veracruz, Yucatán, Zacatecas y el Territorio de la Baja California.”
La fecha real de la erección del Estado Libre y Soberano de Colima, fue gracias a la investigación del maestro Manuel Velasco Godina, que luego lo plasma en su libro “Estado libre y Soberano de Colima” publicado en el año de 1917, anteriormente la fecha oficial de su erección se conmemoraba el 5 de febrero, -fecha también de la promulgación de la Constitución nacional-, otro historiador colimense decía que era el 9 de diciembre, ambas no eran ciertas, como luego quedó demostrado y mediante decreto legislativo se corrigió.
El maestro Godina como investigador, le demostró al gobierno estatal el error y una vez constatado, el Congreso del Estado de Colima, emitió el decreto 252 “Por el que se declara el día 11 de marzo de cada año, como el “Día del Estado Libre y Soberano de Colima”.
Así es que, este día 11 de marzo de 2022; se conmemora en todo el Estado, tal festividad. Organizaciones civiles también lo hacen, unas de ellas, el Club Primeras Planas y el Archivo Histórico del Municipio de Colima, en la sede de este último edificio, este día a la 11:00 le harán su festejo con un evento académico.
En el decreto 252 de la LVIII legislatura del Estado se establece que: “desde la época prehispánica, con antecedentes que se remontan a más de dos mil años, el nombre de Colimán era una referencia común entre los habitantes de los diversos poblados indígenas de la extensa zona geográfica para nombrar al floreciente reino que era gobernado por el Hueytlatoani”.
Que, a la llegada de los españoles; “quienes fundan el 25 de julio de 1523, en la antigua Caxitlán, donde hoy se localiza la población de Caleras, del municipio de Tecomán, una Villa con el nombre de Colimán o Colima en honor a la prosapia de nuestro otrora poderoso reino”.
Cuatro años más tarde la trasladan al lugar que hoy ocupa la capital colimense. Y ya en 1536 se le conoce como la villa de Colima, nombre que conservaría hasta la Constitución de 1824, reconociéndola como provincia.
Desde que fue reconocido como Estado, Colima a pesar de tener un territorio pequeño, es una entidad con ideología propia y parte importante de la federación; como Estado reconoce y garantiza el Estado federal; sin embargo, desde que tenemos este régimen político; un compromiso de la nación, de fortalecer a las entidades federativas, ese fue el objetivo del pacto; de que cada Estado fuera autónomo e independiente en todos los sentidos.
Este compromiso federal, ha sido cuestionado por académicos e intelectuales, debido a que, desde hace muchos años, se le han estado quitando facultades a los estados, haciéndolos creer que depende de la Federación, cuándo y cómo les quita sus atribuciones y muy difícil que las entidades federativas condicionen a la federación para que les traslade algunas de sus atribuciones.
Es necesario revalorar el objetivo del Pacto Federal; pues los principios y valores de esta institución, que el Estado de Colima se compromete a respetar desde su erección en 1857. El día de la erección del Estado de Colima, el motivo de festejos por todas las autoridades locales, ya que es el nacimiento de nuestro Estado y como tal, dicho acontecimiento debe conmemorarse y vivir su historia.