No recuerdo la fecha en que me enteré de su existencia, lo que sí tengo claro es que esa primera vez que leí sobre él estaba en la redacción de Futbol Total . Mi primera sensación fue que, ante mis ojos, se encontraba otra historia más del “nuevo tal”. Debo confesar que ese tema no me gusta, ¿cómo es posible asegurar que un escuincle será ?

Pero, no me pregunten por qué, seguí leyendo y me interesó mucho el nuevo crack en ciernes. Quizá el que trajera el sello de “ Hecho en La Masía ” fue el motivo; no me atrevería a asegurarlo. Vi las fotos y me llamó más la atención; sin verlo en acción ni un segundo, ya me parecía que —en efecto— tenía pinta de buen futbolista. A los pocos meses lo vi jugar y me encantó.

Es verdad que no estaba jugando en el máximo nivel y, muchas veces, destacar en el futbol de menores no garantiza nada. De igual manera, me pareció que le sobraba para alcanzar las alturas a las que estaba destinado. Y un día, Ronaldinho habló bien de él. Listo. Se confirmaban todas las sospechas: estamos ante la presencia de algo serio.

Todo esto lo pienso porque hace mucho que no dedicaba ni un segundo a pensar en él. Y es que las decepciones fueron muchas a lo largo del camino. Pero este fin de semana, de pronto, me asaltó una duda: ¿Qué tan mal estará Giovani dos Santos para no ser titular indiscutible en un América tan austero?

Físicamente, debe estar bien; si no, para qué entra en la convocatoria. Desperdiciar oportunidades ha sido la constante en su carrera, pero uno pensaría que después del porrazo que significó ser cortado por el LA Galaxy (de manera justa), y a la edad que tiene, aprovecharía al máximo su último tren.

Seamos honestos: En este América, Dos Santos debería ser inamovible y capitán. Por sus condiciones, nunca faltar a la discusión de quién es el mejor jugador de la Liga MX. Pero el sábado, Santiago Solari prefirió poner a Naveda antes que al exblaugrana. Y fue una decisión más que sensata.

En Europa, Giovani fue intermitente, tuvo altas y bajas; en la MLS, lo mismo, pero aquí ha sido absolutamente constante: Hemos visto poco y nada de él. A grado tal que la directiva no asegura que le ofrecerá una extensión de contrato. Giovani dos Santos apenas tiene 31 años, hoy podría estar en el pico de su rendimiento, pero tristemente es otro gran talento que se quedó en camino de ser “el nuevo tal”. Otro gran talento que se quedó en un futbolista de jugaditas.

Adendum. Knut

se “avivó”, desconfió de su Máquina y le apostó al Puebla. Futbolísticamente, hizo un entripado monumental, pero vio su cuenta y se le pasó.

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