Estamos a 77 días de la jornada electoral del 2 de junio, la cual representa la encrucijada determinante para el presente y futuro del país. Y para ello, la participación ciudadana masiva se erige como un pilar fundamental para reconstruir el rumbo de la nación.
La urgencia por sacar de la presidencia y del Congreso a Morena es innegable, pues cada día se presenta como una tarea imperativa para construir las soluciones a problemas que golpean inmisericordemente a la población, como lo son la pobreza, inseguridad, ingobernabilidad y violencia.
En toda democracia, el voto es la expresión más directa y poderosa de la voluntad popular. Es a través de las urnas que la ciudadanía ejerce su derecho fundamental de elegir a sus representantes y definir el curso político del país. En este sentido, una participación masiva en las elecciones del 2 de junio enviará un claro mensaje: el pueblo mexicano exige un cambio.
En México la erosión que Morena ha hecho de la división de poderes se ha traducido en corrupción, complicidad, negligencia e irresponsabilidad. No hay alguien que se haga cargo del gobierno. Por ello, restaurar un equilibrio adecuado entre el Legislativo, Ejecutivo y Judicial es esencial para garantizar un gobierno eficaz, responsable, transparente y capaz de rendir cuentas ante la ciudadanía.
La confianza en las instituciones democráticas es imprescindible para el funcionamiento saludable de cualquier sociedad. Sin embargo, en los recientes 5 años, la credibilidad de las instituciones mexicanas ha sido socavada por la corrupción, el nepotismo y la falta de transparencia. Sacar de la presidencia y del Congreso a Morena representa un primer paso crucial para restaurar la confianza del pueblo en sus representantes y fortalecer la legitimidad del sistema democrático.
Al votar masivamente en las elecciones del 2 de junio, la ciudadanía tiene la oportunidad de fomentar la diversidad política y promover un ambiente donde todas las voces sean escuchadas y respetadas.
Cada voto cuenta en la construcción del futuro de México. Es una oportunidad única para la ciudadanía de hacerse escuchar y de trabajar hombro con hombro con Xóchitl Gálvez para reconstruir el país sobre la base de la justicia, la equidad y el respeto a los derechos fundamentales.
Es hora de actuar, de votar con convicción y de hacer historia en la búsqueda de un México mejor para todos.
Es el momento de tu familia, de protegerla y de garantizarle un mejor futuro. Por eso, ¡tod@s a votar el 2 de junio por Xóchitl Gálvez y las candidaturas del Frente Fuerza y Corazón por México!