Este 2023 se inaugura con nuevos campos de acción colectiva, producto de lo realizado en 2022. En el campo de la economía social y solidaria se abrió recientemente -está aún tibia- la Convocatoria para el diseño de propuestas de Programas en Economía Social. La convocatoria es la suma de esfuerzos de la Red Internacional de Investigación en Economía Social desde la Epistemología del Sur, la Campaña por un Currículum Global de la Economía Social Solidaria y la Red Institucional para el Fortalecimiento de la Economía Social y Solidaria de la Universidad Autónoma Metropolitana.

La convocatoria es el ensamble de esfuerzos que fueron concebidos en distintos espacios y ahora, por razones estratégicas, en una lectura prospectiva, convergen: la convocatoria del Programa de Servicio Social y Prácticas Profesionales que fomenta la Economía Social y Solidaria para el Desarrollo Comunitario Local (ANUIES, Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Universidad Iberoamericana (Puebla) y UAM (unidades Xochimilco e Iztapalapa); el conversatorio Buenas Prácticas de Economía Social y Solidaria en las IES (octubre 2022).

Otra fuente es el conjunto de actividades impulsadas desde la Campaña por un Currículum Global de la Economía Social Solidaria. Recordemos una premisa de la Campaña: “solo cambiando el modelo dominante de desarrollo económico la humanidad puede implementar la Agenda 2030, alcanzar la paz que tanto deseamos […] y detener los daños causados por el cambio climático”, reconociendo que en la cultura del capital la pedagogía de control social apunta a la construcción de consumidores (en donde lo ciudadano y la militancia son desalentadas sistemáticamente, desde la narrativa hegemónica dominante). El sentido de propósito apunta hacia el reconocimiento de que otra economía es posible (para esto, la acción educativa subraya la importancia de cuestionar el sentido común que domina en los establecimientos escolares, como reproducción).

En el caso de la UAM, la Red Institucional para el Fortalecimiento de la Economía Social y Solidaria de la UAM realizó dos importantes y numerosos Foros en esta materia, en un primer momento recuperando lo mismo discusiones teóricas como experiencias prácticas, mientras que en el segundo Foro se puso mayor atención en experiencias concretas, puntuales, para construir un repertorio de los activos en la economía social y solidaria. Se está en los últimos toques editoriales para que se presente la publicación de la primera experiencia forista.

Como señala un activo colega académico, Ricardo Contreras Soto, las carreras sobre Economía Social están llamadas a contribuir a construir "otro mundo mejor". En ese sentido, y en aras de sumar experiencias, retomo lo planteado por Pablo Sisti y Carlos Andujar (Página 12, 01/01/2023), docentes argentinos, que resumen la propuesta de El nuevo diseño curricular del Profesorado de Economía de la Provincia de Buenos Aires. En la discusión amplia que se ha dado en América Latina, los esfuerzos de la economía social y solidaria forman parte de la alteridad en el contexto actual del capitalismo, con el objeto de que se materialicen estoscambios en la “construcción de una ciudadanía participativa, crítica y emancipadora”.

En noviembre 2022 se realizó el Consejo General de Educación en la provincia de Buenos Aires, aprobándose distintos diseños curriculares (atreviéndose a modificar lo formulado a fines de los años 90). Se plantea que “Lejos de una visión ahistórica, universal y matemática, con eje en la escasez y la eficiencia, la nueva propuesta curricular del profesorado en Economía apunta a formar docentes desde la Economía Política” […] desde una perspectiva histórica y social, con centro en la producción y apropiación del excedente económico, el análisis de los actores sociales, el vínculo con la naturaleza y la inescindible perspectiva ética”.

Tarea a replicar, con metodologías ad hoc para consultar con los diferentes actores del sistema educativo: “docentes, estudiantes, directivos, inspectores, jefes de áreas y carreras, sindicatos), especialistas disciplinares, didácticos y pedagógicos, asociaciones de profesionales y universidades nacionales”. En su materialización, se plantean tres puntos clave: “1. La centralidad de la enseñanza, como acción clave para la tarea educativa y el trabajo docente; 2. El análisis de las transformaciones sociales contemporáneas, con especial hincapié en la perspectiva de género, ambiental y la ciudadanía digital, como problemas que interpelan las prácticas docentes; 3. El abordaje de las construcciones sociales, políticas, culturales y pedagógicas desde una visión latinoamericana, argentina y bonaerense” (nacional y local, en cada experiencia concreta). Poniendo atención en que el proceso educativo debe incorporar prácticas de campo, visitas a museos, presentaciones de libros, entre otras, es decir, poner de relieve la vida académica extramuros.

Modificaciones en la enseñanza de la micro y macroeconomía, apuntando hacia “un abordaje multiparadigmático que problematiza el conocimiento y promueve una mirada crítica, reflexiva y comprometid a de y con la realidad económica de la sociedad”; se busca que en el nuevo currículum se incorporen otros paradigmas, concretamente, lo referente a “la economía feminista, la economía ecológica y la economía social y solidaria”.

He insistido en este espacio, a la luz de evidencias empíricas y de la discusión teórica, en observar atentamente lo señalado por J-F Chanlat (2019): “Los estudios norteamericanos sobre la influencia de los valores en un programa universitario han demostrado claramente su papel en las representaciones de la realidad social por parte de los estudiantes. No es casualidad que muchos estudiantes de administración y economía tengan una visión del mundo más utilitaria que los de otras disciplinas; de hecho, este es a veces el único discurso que escuchan y leen”. E. Tijerina(2008) apunta en la misma dirección: “en estudios experimentales sobre la cooperación humana, los estudiantes de economía y de administración de negocios son notoriamente no cooperativos. ‘Aprender economía, así parece, puede hacer a la gente más egoísta’”. Los acontecimientos recientes en América Latina, por el peso creciente del poder judicial en las decisiones políticas (Perú, Brasil, Argentina y México), también exigen una mirada crítica sobre la formación profesional en las escuelas de Derecho. Mucha tarea por delante, con una asignatura pendiente: repensar lo ético, como compromiso activo en la formación profesional de economistas (docentes y estudiantes), “ comprometidos a transformar la realidad injusta ” (Sisti y Andujar, 2023).


(Profesor de la UAM)

Google News

TEMAS RELACIONADOS