El pasado primero de septiembre dio inicio el primer periodo ordinario de sesiones del último año de la LXV Legislatura. En esta ocasión, tengo el honor de presidir la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado de la República, en la cual reformamos el primer párrafo del artículo 65 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de Periodo de sesiones ordinarias del Congreso de la Unión, con el objetivo de que en 2024 las y los legisladores salientes no se empalmen con los entrantes.

En nuestra agenda legislativa, en el Senado de la República aún tenemos temas pendientes por discutir y aprobar, como los nombramientos en materia educativa, administrativa, electoral, de derechos humanos, agrarios y en materia de transparencia.

Por otro lado, está pendiente la nueva Ley de Aguas Nacionales, la cual tiene por objeto regular la explotación, uso o aprovechamiento de dichas aguas, su distribución y control, así como la preservación de su cantidad y calidad para lograr su desarrollo integral sustentable.

Además, uno de los retos legislativos que tenemos es la nueva Ley General de Mecanismos Alternativos de Solución de Controversias, que busca encauzar la voluntad de particulares para resolver conflictos de manera ágil y amigable, así como eliminar las formalidades excesivas, los términos extensos, los gastos onerosos y los recursos e impugnaciones que se dan en los juicios formales.

Tenemos el compromiso de cumplir ya que como legisladores al no emitir una ley, o no aprobarla en tiempo y forma, privamos a los ciudadanos de los beneficios que trae consigo dicha norma, impidiendo el aprovechamiento de las oportunidades que se podrían llegar a generar de hacerlo de manera eficaz.

Desde el Senado de la República estamos comprometidos, diariamente legislando a favor de las y los mexicanos, aprobando reformas en beneficio de la población. No podemos dejar iniciativas rezagadas ni pendientes legislativos sin concluir. Como Senador de la República estoy convencido que el diálogo y los acuerdos que se toman para el desahogo de los temas pendientes son fundamentales para el desarrollo de nuestro país.

Es nuestra obligación como Senadoras y Senadores integrantes de esta Cámara legislar con responsabilidad y apego a la Ley, en favor de las futuras generaciones y de la sociedad.

Senador

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