La Suprema Corte de Justica de la Nación admitió a discusión diversos amparos promovidos por empresas contra algunos artículos de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que se aprobó en 2021 por el Congreso de la Unión, la cual limita la participación de inversionistas privados y garantiza una posición preponderante en el mercado de la Comisión Federal de Electricidad.
Si la Suprema Corte, falla en favor de conceder los amparos esta reforma se declararía inconstitucional, siendo esto un claro retroceso en materia energética para el país, dejando de lado el esfuerzo de todas y todos los mexicanos que queremos un México que no esté sometido a intereses extranjeros.
Ante esto, la Secretaría de Energía solicitó que los Ministros Alberto Pérez Dayan y Luis María Aguilar Morales, sean declarados impedidos para resolver los amparos en contra de la LIE por un posible conflicto de interés, pues pertenecen al Instituto Mexicano del Amparo, una asociación civil que promovió juicios contra la reforma eléctrica y, por lo tanto, se advierte que su imparcialidad no está garantizada.
Vale la pena recordar la carta al pueblo de México escrita por el Presidente Adolfo López Mateos el 27 de septiembre de 1960, que resalta lo siguiente:
“Solo un traidor entrega su país a los extranjeros; los mexicanos podemos hacer todo mejor que cualquier otro país. Cuando un gobernante extranjero me pregunta si hay posibilidad de entrar al negocio de los energéticos o a la electricidad, le respondo que apenas estamos independizándonos de las invasiones extranjeras que nos vaciaron el país. Pero que en tanto los mexicanos si queremos invertir en el petróleo americano o en su producción de energía eléctrica, por si quieren un socio extranjero
En México la Constitución en muy clara: los recursos energéticos y los yacimientos son a perpetuidad propiedad única y exclusiva del pueblo mexicano. El resto de las especulaciones al respecto son traición a la patria. Industrializar el país no implica una subasta pública de nuestros recursos naturales, ni la entrega indiscriminada del patrimonio de la patria.”
No podemos permitir que los ministros defiendan que las empresas extranjeras sean las que manejen todo lo relacionado con la industria eléctrica, pues los consumidores finales, que somos todo el pueblo de México, somos los más afectados, pagando tarifas excesivas como en otros países en donde privatizaron por la industria eléctrica.
En el Senado de la República siempre defenderemos los intereses y la soberanía nacional, por ello, presenté un punto de acuerdo exhortando a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a apegar su actuar a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y a defender la Patria antes que a los intereses extranjeros.
Senador