Para mi amigo Javier Sicilia.
El 28 de marzo, se cumplieron 10 años del surgimiento del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD), nacido a raíz del asesinato del hijo del poeta Javier Sicilia, Juan Francisco Sicilia Ortega y sus 6 amigos: Julio, Luis, Gabriel, Jesús, Álvaro y Socorro, el 28 de marzo de 2011, en el estado de Morelos.
El MPJD ha sido un referente ético en el país, un movimiento donde el dolor, la rabia y el amor conviven. Desde 2011, Javier Sicilia y el MPJD han denunciado el contexto de emergencia, denunciando los saldos de la llamada guerra contra las drogas con su escalada de violencia y deterioro del tejido social y comunitario.
Cuando hace 10 años el Movimiento por la Paz apareció, había en nuestro país 40 mil personas asesinadas, 10 mil desaparecidas y un montón de fosas clandestinas sin descubrir. El recuento de una década de horror que ha documentado el Movimiento, nos dice que, tras este tiempo, hay más de 300 mil asesinados, más de 84 mil desaparecidos, más de 4 mil fosas clandestinas y más de 39 mil cuerpos en los SEMEFOs sin identificar.
Las constantes a las que se ha enfrentado el MPJD y los colectivos de víctimas desde hace una década, han sido el alto índice de impunidad (casi total), la corrupción y la infiltración de los grupos criminales en las instituciones públicas de los tres niveles de gobierno.
El Movimiento se ha caracterizado por ejercer el diálogo con todos los sectores de la sociedad. Los más importantes, han sido los llamados Diálogos por la Paz, los cuales han sido reuniones sin precedente histórico con el Poder Ejecutivo, realizando dos con el expresidente Calderón y, hasta ahora, dos con el presidente López Obrador. Además, en 2011 realizó un encuentro con el poder Legislativo del cual surgió la Ley General de Víctimas, una de las políticas públicas más importantes para atender el problema de la violencia.
En sus diez años, el MPJD ha dialogado con los candidatos presidenciales de los procesos de 2012 y 2018. En ellos, Javier Sicilia y el MPJD han exigido a todos los partidos políticos limpiar sus cuadros y han visibilizado que ninguno de ellos se salva de contar con criminales entre sus filas.
Luego de que Andrés Manuel López Obrador ganó las elecciones de 2018, el MPJD, colectivos de familiares de personas desaparecidas y organizaciones sociales presentaron al actual presidente mexicano una serie de propuestas en materia de justicia transicional para atender la crisis que su gobierno heredó de las administraciones anteriores.
El Movimiento ha denunciado la falta de empatía y acciones para la justicia en el actual gobierno,comparando al presidente López Obrador con Calderón y Peña Nieto, debido a la traición a la ciudadanía, al haber reforzado la presencia del ejército en las calles y al desmantelar las instituciones que las víctimas crearon como un inicio del camino hacia la paz y la justicia.
Sin duda, el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad y Javier Sicilia, son un colectivo y una persona que todas y todos debemos conocer, un movimiento que persiste a pesar de los años y todos los obstáculos. Una lucha imprescindible que no dejará de denunciar las causas y efectos de la guerra contra las drogas que no se detiene, una guerra emprendida por Calderón, continuada por Peña Nieto e institucionalizada por López Obrador. La historia del MPJD es una referencia de lo que sucede en el país: una década de guerra, impunidad y simulación, pero sobre todo con un doloroso continuismo.
