Alberto Capella
Exsecretario de seguridad
Fundador de AC Consultores
Yolanda Sánchez Figueroa, abogada graduada en la Universidad Interamericana para el Desarrollo, se convirtió en la primera Alcaldesa de Cotija, Michoacán, y ha ocupado el cargo desde septiembre de 2021. Hasta hoy, para una gran mayoría de los analistas políticos, era una figura desconocida, no obstante, esta semana su nombre se hizo conocido debido a que fue secuestrada, noticia que generó un estado de inquietud social que duró 59 horas. Aquí un poco de contexto histórico:
el pasado 1 de abril del año en curso, se registró un ataque armado en las instalaciones de la Presidencia Municipal y la Dirección de Policía del municipio de Cotija, en el cual perdieron la vida dos Policías Municipales: Armando Hernández y Sergio Zambrano. Durante dicho incidente, se realizaron amenazas dirigidas a la Alcaldesa con el objetivo de que la mandataria “siguiera las órdenes” [del crimen organizado].
Luego, el 17 de abril, aproximadamente 60 individuos presuntamente afiliados al CJNG, a bordo de lujosas camionetas con las siglas del grupo, aparentemente escoltados por miembros de la Guardia Civil Estatal de Michoacán, llegaron a la presidencia municipal de Cotija. Desarmaron a los policías presentes, les confiscaron los radios de comunicación y sometieron a la alcaldesa, así como al Director de Seguridad Municipal, Leo Báez [los encañonaron], bajo la amenaza de un individuo que afirmó actuar por instrucciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Estatal, diciendo que asumirían el control de la seguridad del municipio.
Al día siguiente, el 18 de abril, uno de los comandantes policiacos solicitó asistencia al Ejército Mexicano. A través de un operativo conjunto, lograron recuperar la Comandancia, que fue devuelta a las autoridades municipales. Además, durante la operación, detuvieron a dos individuos, uno de los cuales fue identificado como operador del CJNG, mientras que el otro resultó ser un miembro de la Policía Estatal. En el vehículo en el que se encontraban, se halló armamento, cartuchos y drogas.
José Alfredo Ortega, Secretario de Seguridad Pública de Michoacán, destituyó a Leo Báez, quien se desempeñaba como Director de Seguridad en Cotija. Luego, entregó el control de la corporación municipal a Omar Badillo, un Policía Estatal, junto con
otros agentes de Michoacán, a pesar de no contar con las facultades legales para llevar a cabo dicha acción.
El 20 de abril, el comandante Omar Badillo, junto con los otros mandos que habían sido impuestos ilegalmente por Alfredo Ortega, fueron destituidos debido a que violaron la autonomía constitucional del Ayuntamiento. Después de estos acontecimientos, el 23 de abril, la alcaldesa denunció amenazas de muerte dirigidas hacia ella, lo que la llevó a solicitar una licencia de 60 días para separarse temporalmente de su cargo. Sin embargo, solo se ausentó durante 20 días antes de reincorporarse a sus funciones.
Históricamente la alcaldesa no disponía de escoltas. Según los medios de comunicación locales, las amenazas que recibió siempre fueron atribuidas al CJNG. El Secretario de Gobierno en Michoacán, Carlos Torres, alegó no tener información sobre las amenazas dirigidas a la alcaldesa, a pesar de que estas fueron divulgadas públicamente por los medios locales.
Así, el pasado 23 de septiembre la presidenta municipal de Cotija fue secuestrada. Ese día, la alcaldesa tuvo una visita médica por la mañana y pasó la tarde de compras en lugares céntricos de Zapopan. Cuando salía de la Plaza Andares, en la intersección de la avenida Patria y la calle Gabrielle D’Annunzio, en la colonia Jardines de La Patria, un grupo de hombres armados interceptó el vehículo en el que viajaba con sus familiares. A Yolanda Sánchez la obligaron a subirse a otro automóvil.
Después de estos hechos, Alfredo Ramírez, Gobernador de Michoacán, reconoció que ha habido evidentes situaciones de enfrentamientos y operativos intensos en la zona de Cotija. En consecuencia, 11 presidentes municipales de Michoacán cuentan con alguna medida de seguridad proporcionada por el Gobierno o la Fiscalía de Michoacán. Sin embargo, Yolanda Sánchez no solicitó ese respaldo y durante los dos días y medio de su desaparición, sus captores nunca exigieron un rescate o un pago a cambio de su liberación.
El 26 de septiembre, Yolanda Sánchez fue localizada en el municipio de Villamar, a unos 40 kilómetros al noreste de Cotija. A las 05:00 horas, el Secretario de Seguridad Pública de Cotija solicitó apoyo a personal de la Guardia Nacional después de recibir una llamada de la Presidenta Municipal, en la que informó que ya la habían liberada y que se dirigía en un autobús hacia Zamora. A las 06:15 horas, se confirmó oficialmente la liberación de la Alcaldesa, quien venía desde Mazamitla, Jalisco.
Michoacán cuenta con una de las principales rutas marítimas y aéreas del Pacífico utilizadas para el tráfico de cocaína y otras drogas. Además, se emplean rutas terrestres para el transporte de estos cargamentos. Desde 2015, el Cártel de Jalisco
ha estado en disputa por la zona contra los Caballeros Templarios y grupos de autodefensas que se han organizado.
Tras su liberación, Yolanda Sánchez emitió un mensaje en el que agradeció al Presidente de la República y al Gobernador de Michoacán por “su coordinación para que pudiera regresar con bien”. Todo parece indicar que el mensaje criminal que se prolongó durante 59 horas quedó claro: la gobernabilidad criminal en Cotija, en Michoacán, está garantizada… Repito: la gobernabilidad criminal a lo largo y ancho de México está garantizada…