En 1997, el productor de la Cuarta Transformación, Epigmenio Ibarra, lanzó otra telenovela: “Mirada de Mujer”. Al mismo tiempo, se gestaba la película La Ley de Herodes y unos años más tarde salió “El Infierno”. El personaje principal de estos largometrajes fue el actor Damián Alcázar.

Ambos –Ibarra y Alcázar—son ahora actores principales del gobierno de Andrés Manuel López Obrador de quien son muy cercanos. Pasamos de mirada de mujer a el infierno por el mal manejo de la pandemia –casi 200 mil personas fallecidas--, la inseguridad, la crisis económica, la falta de medicinas para niñas y niños con cáncer, por la descalificación cobarde de los movimientos de mujeres que luchamos por la igualdad.

Vivimos en la ley de herodes: o te ching…o te jodes. Ese es el mensaje del presidente, quien exige que todas y todos nos sumemos a su ideología y aceptemos su mal gobierno. Si no es así, descalifica, agrede e insulta desde el púlpito presidencial.

Al paso de estos 26 meses del gobierno de Morena, muchas y muchos están decepcionados por los actos, omisiones y decisiones de un hombre que solo piensa en sí mismo y por eso ha dañado profundamente a nuestro país.

Ni las mujeres ni las organizaciones civiles dedicadas a defender los derechos femeninos hemos recibido apoyo de este gobierno. Por el contrario, hemos sido insultadas y minimizadas por el mayor violentador de este país.

Tampoco ha cumplido su compromiso de acabar con la corrupción. Solo hay que ver los privilegios de su círculo cercano: su hermano Pío, la secretaria de la Función Pública y esposo, el director de la CFE y el más reciente e impresentable candidato al gobierno de Guerrero. Nominados, entre muchos otros, a “La ley de Herodes”.

Hay que recordar que entre las promesas de campaña del entonces candidato de 2018, destacan incrementar la ayuda a las mujeres y el combate la corrupción. Millones de mujeres y hombres creyeron en que el cambio estaba por llegar.

Por eso hago referencia a “Mirada de Mujer”. En campaña ofreció apoyo a las mujeres, pero los quitó todos, como es el caso de las estancias infantiles y los refugios para mujeres violentadas. Para ellas, este gobierno se ha convertido en “El Infierno”.

Ibarra y Alcázar son consentidos de López Obrador. Mientras el presidente acababa con los fideicomisos, su gobierno otorgó créditos millonarios al creador de “Mirada de Mujer”. ¡Vaya paradoja de quienes ayer denunciaron arbitrariedades y hoy ensalzan sinrazones para recibir beneficios indebidos! Exaltar la figura autoritaria les deja jugosos dividendos económicos.

Quienes ayer criticaban al poder, hoy lo halagan por los mismos o peores actos autoritarios; quienes ayer defendían a las mujeres y les daban un papel principal en una telenovela, hoy apoyan los insultos que se vierten desde Palacio Nacional hacia nosotras; quienes ayer actuaban en películas para denunciar la corrupción, hoy están a favor de ella, siempre que esta les genere ganancias.

Frente a la denuncia de políticos que hacían valer su ley por encima de la Constitución, está el propio presidente que, con su propia ley, cubre con manto de impunidad a sus elegidos, somete a su bancada legislativa, destruye a las instituciones y regala dinero público.

Frente al infierno que miles de familias viven por el dolor y la muerte de sus seres queridos, está la estrategia de abrazos y no balazos que ha fortalecido la delincuencia organizada con un sello de impunidad institucional.

Es una pena tener un gobierno decidido a ejercer el espectáculo para posicionar su política electoral.

Diputada federal

Google News

TEMAS RELACIONADOS