Washington.— El caso del exsecretario mexicano de Seguridad Pública Genaro García Luna ante la justicia de Estados Unidos implicó todavía más al exfuncionario con una trama delictiva para favorecer a los cárteles del narcotráfico.
La madrugada del viernes, la fiscalía de Estados Unidos vinculó a García Luna con las actividades criminales de Iván Reyes Arzate, La Reina, excomandante de la Policía Federal condenado en Chicago por pasar información al Cártel de Los Beltrán Leyva.
El gobierno estadounidense apuntó en un documento judicial que García Luna supervisaba, entre otros, la unidad especial de la policía federal mexicana entrenada por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), que comandó Reyes Arzate entre 2008 y 2016. Por tanto, ambos casos de corrupción y colusión con los cárteles del narcotráfico están relacionados.
“Reyes Arzate era el comandante de la SIU [Unidad de Investigación Sensible, por sus siglas en inglés, de la DEA] en la Policía Federal cuando Genaro García Luna era el secretario de política pública, quien supervisaba a la Policía Federal mexicana. Al igual que Reyes Arzate, el gobierno espera presentar pruebas de que García Luna aceptó sobornos de la organización Beltrán Leyva”, explicó la fiscalía.
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Ayer, la fiscalía de Nueva York presentó nuevos cargos por tráfico de drogas contra Arzate.
Reyes Arzate, quien se declaró inocente en una comparecencia celebrada en un tribunal federal del barrio neoyorquino de Brooklyn, fue imputado por tres cargos.
Los tres de conspiración, uno para importar cocaína, otro para distribuir y poseer cocaína con la intención de distribuirla y un tercero “para la distribución internacional” de esa droga, según el documento de la fiscalía firmado por el fiscal federal del Distrito Este de Nueva York, Richard P. Donoghue.
Según la acusación, La Reina otorgó “asistencia corrupta” a los Beltrán Leyva entre mediados y finales de los años 2000. Concretamente a El Seguimiento 39, un grupo relacionado no sólo con los Beltrán Leyva, sino también con el Cártel de Sinaloa y otros.
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Reyes Arzate abusaba de su posición de principal punto de contacto e intercambio de información entre la DEA y las autoridades mexicanas. “A cambio de al menos centenares de miles de dólares en sobornos, ayudaba a los cárteles mexicanos a pasar cocaína a los Estados Unidos”, concluyó el gobierno estadounidense.
Uno de los ejemplos que se detalla en la acusación contra La Reina habla de un soborno de 290 mil dólares en 2016 para ayudar a corromper a otros funcionarios mexicanos.
Reyes Arzate está actualmente cumpliendo condena en Estados Unidos por pasar información de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) al Cártel de los Beltrán Leyva. La Reina debía ser liberado el 27 de enero de 2020 e inmediatamente deportado a México, pero la fiscalía ha solicitado que se le mantenga en prisión.
Mantienen bloqueo a hermana
En tanto, en México, las cuentas bancarias de Esperanza García Luna, hermana del exsecretario de Seguridad Pública, seguirán bloqueadas, puesto que así lo determinó un juez federal.
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El titular del Juzgado Décimo de Distrito en Materia Administrativa, con sede en la Ciudad de México, Francisco Gorka Migoni, negó la suspensión definitiva en el juicio de amparo que Esperanza García Luna interpuso este mes contra el congelamiento de sus cuentas bancarias ordenado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), encabezada por Santiago Nieto Castillo.
