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La Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) consideró que la forma en que se está presentado la información al público sobre la ubicación y los precios de la gasolina y el diesel “son de gran utilidad para transparentar el mercado”.
Sin embargo, destacó que “es conveniente que se incluyan variables que influyen en la decisión de compra, como la calidad del producto, imagen de las instalaciones, promoción, entre otros”.
El “¿quién es quién en los precios?” que Andrés Manuel López Obrador utilizó ayer en la conferencia matutina coincide con los planteamientos del gremio gasolinero, “cuando expresa su confianza en los mecanismos regulatorios del propio mercado y no en los precios determinados por decreto, que han demostrado históricamente su profunda inconveniencia económica y social, e inhibido la inversión indispensable en proyectos de infraestructura”, agregó el grupo empresarial.
Por su parte, la angloholandesa Shell, mencionada como uno de los grupos con los precios de gasolinas más altos en México, señaló que el precio del petróleo crudo ha aumentado de 43.65 dólares por barril al inicio de 2019 a 63.59 dólares al 12 de abril.
Si bien ha habido una reducción en el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), el incremento en el precio del crudo ha erosionado su impacto en el de los combustibles, indicó.
Además, precisó que existen regiones con precios diferenciados en el país. “Por ejemplo, los estados fronterizos tienen un tratamiento fiscal distinto a los del centro del país, lo que les permite tener acceso a combustibles más baratos. Se trata de una distinción importante que debe considerarse para interpretar con mayor precisión la estructura de precios.
“Las gasolinerías Shell son 1% del total de estaciones de servicio en el país, por lo que no son un actor preponderante que pueda impactar en los precios”, subrayó la empresa. Onexpo coincidió con el planteamiento de Shell en el sentido de que distintas fuentes privadas y públicas de alta confiabilidad, como Hacienda y empresas especializadas, señalan que los precios de las gasolinas y el diesel están directamente ligados a los del mercado internacional.
Indicó, por ejemplo, que en el primer trimestre de 2019 “estos precios internacionales registraron incrementos hasta de 50% y configuraron una tendencia de igual o mayor volatilidad en lo que resta del año”.
