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Especialistas en seguridad consideran que el hecho de que la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) elevara a 10 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la detención de Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, hijos de Joaquín El Chapo Guzmán Loera, conocidos como Los Chapitos, revela que Estados Unidos presiona a México para que desmantele el Cártel de Sinaloa por el tráfico de fentanilo.
Raúl Benítez Manaut, profesor investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y especialista en seguridad nacional, señala que el gobierno de EU está endureciendo la presión sobre el gobierno mexicano con el objetivo de que sea más proactivo para desmantelar al Cártel de Sinaloa.
“Estados Unidos está usando al gobierno federal como emisario para mandarle un mensaje a China, que colabore en el control de sus precursores químicos del fentanilo”, asegura a EL UNIVERSAL.
Expresa que es toda una situación relacionada con la geopolítica del país vecino y al final de cuentas lo que quiere el presidente Joe Biden es endurecer su discurso para ganar votos.
Resalta que se acercan las elecciones de 2024 en EU y Biden tiene que demostrar dureza; una forma de hacerlo es desmantelar al Cártel de Sinaloa con Los Chapitos y luego con Ismael El Mayo Zambada.
Juan Carlos Montero Bagatella, especialista en seguridad pública, dice que es un tema que expone el conflicto entre el gobierno de López Obrador y la DEA.
Subraya que el gobierno mexicano ha buscado que no haya agentes de la DEA en territorio nacional; posteriormente, a través de las negociaciones que ha realizado con EU, impulsó que hubiera agentes pero que se le informara a las autoridades mexicanas y que los mismos estuvieran desarmados.
Asimismo el profesor del Tecnológico de Monterrey enfatiza que se debe tener en cuenta que hay un conflicto abierto entre la DEA y el gobierno mexicano y parte de ello fue la detención y posterior liberación del general Salvador Cienfuegos, exsecretario de la Defensa Nacional en EU, una acción que respaldó la DEA frente a la negociación para liberarlo por parte de México.
Montero resalta que el gobierno estadounidense exige acciones al de México y que los principales proveedores de drogas para EU son los cárteles De Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Alexei Chévez Silveti, consultor en temas de seguridad y fuerzas armadas, destaca a su vez que la investigación que hizo pública la DEA sobre Los Chapitos se desprende de los antecedentes en la detención de El Chapo.
“Obviamente son los herederos naturales [Los Chapitos], se quedaron con la estructura criminal y nadie les ha peleado el control del cártel. El cambio generacional del papá a los hijos fue una oportunidad de negocios que es el fentanilo”.
