La próxima visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Washington, para reunirse con Donald Trump es indiferente para los demócratas. Sin embargo, advirtieron que el mandatario de Estados Unidos es cambiante, como el alacrán que pide ayuda para cruzar el río y a la mitad del camino pica a la rana.
Gricha Raether, representante del Partido Demócrata en México, aseguró en entrevista que Donald Trump está claramente en campaña electoral, por lo que sugieren cuidado al Mandatario mexicano.
Los demócratas en territorio nacional, dijo, no opinan sobre la política exterior de México, pero de Trump sí advierten que cualquier cosa puede utilizar con la finalidad de atraer votos para el proceso electoral de noviembre próximo.
El demócrata consideró que no se puede considerar la visita de López Obrador como un espaldarazo para Trump, porque la base política del mandatario estadounidense no lo necesita y mucho menos de un país al que ha atacado tanto.
“Aquí no estoy diciendo que sé qué es lo que pretende hacer [Trump], a lo mejor estoy mal y se hacen superamigos y se toman unos tequilas juntos, pero la verdad es que no creo que sea el caso.
“Es como el alacrán el presidente Trump, en el sentido de que en cualquier momento sube la cola y te pica y va a terminar siendo la historia de la rana del río, en la que el alacrán se monta para que se lo lleve al otro lado y a mitad del camino lo pica, solamente para sacar un beneficio propio. Entonces, ese es un peligro latente”, comentó.
Raether sugirió a López Obrador tener cuidado con Donald Trump, toda vez que hace cualquier cosa para usar a su favor las circunstancias, más cuando se trata de minimizar o atacar a otras naciones.
Consideró que existe una alta probabilidad de que el encuentro del 8 y 9 de julio próximos se utilice como herramienta política para el proceso electoral y que al final puede ser que tenga más de negativo que de positivo.
“Donald Trump todavía está por cobrarse el favor que hizo a México ante la OPEP, que es el caso de la disminución en cuanto a producción de petróleo, esto es abrir la puerta para que Estados Unidos se cobre”, añadió.
Cuestionado sobre la necesidad de un encuentro entre López Obrador y el candidato presidencial demócrata, Joe Biden, Raether consideró que si la visita a Washing-ton fuera neutral, podría ser una buena estrategia.
“Desde la perspectiva de que ahorita el gobierno mexicano ha querido llevarse la fiesta en paz con el gobierno de Trump y el hecho de que, de alguna manera, las posibilidades de reelección de Trump son bastante altas, al menos todavía; sería básicamente jugarse la moneda al aire de: ‘Antagonizo a Trump viendo a Joe Biden, con la posibilidad de que gane Trump, es meterme en problemas; mejor sólo voy a esto como Jefe de Estado y me regreso rapidito para no mover las aguas demasiado’”, consideró.
Por su parte, el representante de los republicanos en México, Larry Rubin, subrayó que la visita de López Obrador a Washington servirá para alinear expectativas comerciales entre las dos naciones.
“Será una oportunidad para que México pueda resaltar su interés y compromiso de verdaderamente ser atractivo para la inversión, considerando que ésta, con o sin tratado, exige certidumbre, porque si no pueden llevarse su dinero y sus miles y miles de fuentes de empleo a otra parte del mundo incluyendo [en esta misma región] a Canadá, que ha creado un clima de certidumbre y respeto a la inversión”, expuso.
Rubin, quien es además presidente de la Comunidad Estadounidense en México, expresó satisfacción por la entrada en vigor del T-MEC, toda vez que aparte de proveer oportunidades para empresarios y para crear empleos en México y la región, dará certidumbre a la inversión.
