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México busca que en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas exista una representación más equitativa, dijo el representante de nuestro país ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente.
Al participar en la reunión de las negociaciones intergubernamentales para la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU, De la Fuente expuso que en este órgano de Naciones Unidas no debe haber privilegios excluyentes, ni estatutos especiales.
Actualmente se llevan a cabo negociaciones intergubernamentales para la reforma del Consejo de Seguridad, en donde se discute la representación equitativa y el aumento de miembros.
El embajador De la Fuente ha expuesto que se busca una reforma integral del Consejo de Seguridad, haciéndolo más equitativo en la toma de decisiones.
No es tarea fácil lograrlo, señaló, toda vez que las posturas entre naciones siguen siendo contrarias, y en ocasiones lejanas unas de las otras, por ello es necesaria la negociación intergubernamental como espacio para el diálogo constructivo, transparente y comprometido.
Ayer, De la Fuente expuso en la reunión que un consejo reformado deberá ser, ante todo, más representativo.
“Una ampliación de personas no es garantía de mayor representatividad, menos aún de que por ello, de manera automática, el consejo será más transparente, más democrático o que rinda mejores cuentas, por eso la cuestión de la representación debe ir aparejada a otros temas, si realmente queremos una reforma integral, no una parcial”, indicó.
De la Fuente recordó que el artículo 23 de la Carta de Naciones Unidas, después de mencionar explícitamente los nombres de los cinco miembros permanentes, que se elegirá a otros 10 integrantes del Consejo de Seguridad, restando especial atención, en primer término, a la contribución de los miembros de las Naciones Unidas al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, y a los demás propósitos de la organización, así como también a una distribución geográfica equitativa.
“La distribución geográfica equitativa alude solamente a una cierta representación, porque algunos miembros electos han sido previamente endosados o aprobados por sus representaciones geográficas o grupos regionales, pero esto no necesariamente ocurre en todos los casos”, dijo.
En el caso de los miembros permanentes, expuso, se representan a sí mismos, pero no a las regiones o a los grupos a los que pertenecen.
“Un consejo más representativo implicaría hacerlo más incluyente y dar más oportunidades de participación equitativa a todos los miembros que quieran formar parte, es decir, en un consejo reformado todas las regiones deben estar mejor representadas de manera equitativa”, indicó.
La convicción de México, manifestó, es que la reforma debe revitalizar el Consejo de Seguridad como un órgano más eficiente, eficaz, transparente y democrático, que refleje los intereses de todas las regiones sin discriminación, sin estatutos especiales y sin privilegios excluyentes.
