El obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, Felipe Arizmendi, es uno de los 13 nuevos cardenales designados por el papa Francisco y que serán ungidos en un consistorio el próximo 8 de noviembre, informó el Pontífice luego del rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, Roma.
El pasado 30 de mayo, Arizmendi fue herido por un disparo de arma de fuego durante un enfrentamiento entre integrantes de grupos delincuenciales que operan en el Estado de México, entidad donde reside actualmente.
Felipe Arizmendi nació en el Estado de México el 1 de mayo de 1940. Se ordenó como sacerdote el 25 de agosto de 1963 y obispo en marzo de 1991.
Arizmendi, de 80 años, se suma a la lista de cardenales mexicanos donde se encuentran Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México; el arzobispo primado emérito de México, Norberto Rivera Carrera, y los arzobispos primados de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, y de Morelia, Alberto Suárez Inda, así como a Javier Lozano Barragán, presidente Emérito del Pontificio Consejo para la Salud, y Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara.
Entre los 13 cardenales que nombrará el Papa, nueve de ellos podrán ser electores en un futuro cónclave.
Cabe recordar que el obispo Arizmendi Esquivel en su estancia en Chiapas fue obispo de Tapachula entre 1991 y 2000 y de San Cristóbal de las Casas entre 2000 y 2017.
El prelado durante sus homilías reitera la importancia de la familia, pues indica que es ahí donde se aprende a ser positivo o negativo para sí mismo y para la comunidad.
En Chiapas, Arizmendi trabajó de la mano del obispo Samuel Ruiz García, a favor de las causas indígenas y de los pueblos originarios del país.