Las cuentas bancarias creadas para depositar el dinero extraído de las secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) y de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), en el esquema de la Estafa maestra, fueron abiertas y vaciadas el mismo día.
Según la denuncia que presentó la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ante la Fiscalía General de la República (FGR) contra Rosario Robles y sus excolaboradores, se detectó que bastaron unos días para dispersar los millones que fueron desviados de la Sedesol y Sedatu.
La UIF detectó que de cuentas bancarias de Sedesol y Sedatu, Emilio Zebadúa, exoficial mayor en ambas secretarías, transfirió recursos por 16 millones 385 mil 899.84 pesos a personas físicas que no tenían relación con las dependencias y que aperturaron ese mismo día cuentas. Tras recibir el dinero, las vaciaron.
“Los recursos recibidos en dichas cuentas bancarias fueron dispuestos de manera rápida, observándose una falta de permanencia de los recursos en las mismas. La mayoría de los retiros se realizaron en efectivo y a favor de personas físicas”, señala la acusación de la UIF.
EL UNIVERSAL informó el pasado sábado que a través de dos cuentas concentradoras, manejadas por Zebadúa, se ejecutó la extracción de recursos para destinarlos a cuentas de personas físicas.
Asimismo, se indica que las autoridades federales siguen la ruta del dinero de la Estafa maestra a España y Panamá.
El esquema de retiro de recursos fue detallado por la UIF en la denuncia presentada en septiembre de 2019 y por la que el 5 de noviembre de 2020 un juez federal con sede en Altiplano, Estado de México, libró una orden de aprehensión contra Robles Berlanga por delincuencia organizada y lavado de dinero.
En ese sentido, un primer retiro fue identificado del 14 de junio al 19 de julio de 2018 en una de las cuentas concentradoras de la Sedatu, por 6 millones 797 mil 897.28 pesos.
La cuenta bancaria a la que fueron destinados esos recursos está a nombre de una persona física y fue abierta el 14 de junio de 2018, es decir, el mismo día que empezó a recibir recursos de la Sedatu, sin que el titular tenga relación con la dependencia.
En tres movimientos de esa cuenta por montos de 438 mil 695 pesos, el dinero fue enviado a otras dos personas.
“Presenta movimiento rápido de fondos, no existiendo permanencia de los activos, por lo que se desconoce el propósito real de la operación realizada, más aún porque los recursos fueron enviados a personas físicas y a una moral cuya relación se desconoce”, observó la UIF.
Esta forma de extraer los recursos de la Sedatu y dispersarlos en cuentas de cuatro personas físicas se repitió en diversas ocasiones, hasta llegar a un total de envíos por 16 millones 385 mil 899.84 pesos.
“Todo lo anterior lleva a esta unidad a establecer la posibilidad de que los recursos enviados a las cuentas bancarias ya señaladas no tuvieron un objeto lícito, sino que, contrariamente, la finalidad fuera desviarlos del verdadero destino para los que fueron originalmente presupuestados”, precisó la UIF.
A Ramón Sosamontes, la UIF lo señaló porque es socio de la empresa Sistema Guerrero Audiovisual, S. A. de C. V., que recibió contratos de obra pública federal en Sedesol y Sedatu, por lo que se presume que incurrió en conflicto de intereses y posibles actos de corrupción.
Robles Berlanga, extitular de Sedesol y Sedatu, ha declarado que sólo tiene 26 mil pesos en su cuenta bancaria, pero la UIF detectó que durante el sexenio pasado llegó a gastar hasta 650 mil pesos en obras de arte y joyas.
Entre agosto de 2016 y enero de 2019 gastó 4 millones 498 mil 853.36 pesos a través de su cuenta bancaria en American Express, de la que su hija Mariana Moguel es beneficiaria. Además, en enero de 2012 compró un collar y aretes por 400 mil pesos, que pagó de contado.