El presunto jefe de la mafia rumana, Florian Tudor, fue trasladado ayer del Reclusorio Norte de la Ciudad de México al penal federal de máxima seguridad del Altiplano, Estado México, informaron fuentes judiciales.
Tudor, detenido en mayo por la Fiscalía General de la República (FGR), cuenta con una suspensión de plano que tiene frenada su extradición a Rumania, país que lo reclama por los delitos de delincuencia organizada, extorsión y tentativa de homicidio agravado.
Las fuentes judiciales dieron a conocer que el imputado seguirá su proceso desde el penal del Altiplano.
Elementos de la Policía Federal Ministerial (PFM) detuvieron el 27 de mayo a Florian Tudor en cumplimiento de una solicitud de detención con fines de extradición, formulada por el gobierno de Rumania, por delitos de delincuencia organizada, extorsión y tentativa de homicidio agravado.
Días después, el Juzgado Décimo de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México emitió la suspensión de plano “para el único efecto de que no se ejecute la extradición”, en el juicio de amparo que tramitó Tudor.
“Se concede de oficio la suspensión de plano para el único efecto de que no se ejecute la extradición, debiendo quedar el quejoso en cuanto a su libertad personal a disposición del Juzgado de Distrito de Amparo en Materia penal en la Ciudad de México, en turno, al que se considera legalmente competente; en el lugar en donde se encuentra recluido o en las instalaciones que para el efecto designen las autoridades responsables, y a disposición del juez de Control de Procesos Penales Federales del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México que haya ordenado la detención de Florian Tudor, para la continuación del procedimiento de extradición”, indicó.
Sin embargo, el juez del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, Marco Antonio Fuerte Tapia, calificó de legal la detención de Florian Tudor, señalado de liderar una banda de presuntos clonadores de tarjetas que opera en los centros turísticos de Cancún y Puerto Vallarta.
Tudor, aprehendido en la sede central de la FGR, en la Ciudad de México, se resistió en un principio a que se le practicaran los exámenes médicos correspondientes, lo que alargó el inicio de la audiencia de control de detención.