Las votaciones en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) no se sujetan, no dan cabida , ni permiten la influencia de factores externos e internos, sino que se determinan a partir de decisiones colegiadas; es decir, las resoluciones en este órgano electoral se basan en la cohesión de la mayoría de las y los magistrados, así lo afirmaron Janine Otálora, Felipe Fuentes, Felipe de la Mata, Reyes Rodríguez e Indalfer Infante.
Durante su participación en el Foro Nacional: La labor de los Tribunales en la Calificación de las Elecciones 2020-2021, organizado por la Asociación de Tribunales Electorales de la República Mexicana A.C. (ATERM), la magistrada y los magistrados del TEPJF aseguraron que las votaciones en este órgano jurisdiccional de ninguna forma se dan por diferencias políticas, ni presiones ni coyunturas partidistas. Sus deliberaciones y fallos son el resultado a un estricto apego a la legalidad determinada por el actual marco constitucional, advirtieron.
La magistrada Janine Otálora Malassis, subrayó que se ha demostrado que nuestras instituciones electorales funcionan y funcionan bien, por lo que, advirtió, “fue un despropósito que hace algunas semanas algunos hayan propuesto regresar sus funciones al gobierno, en lugar de fortalecer y respaldar a las instituciones ciudadanas que nos han costado décadas construir a las y los mexicanos”.
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Dijo que la jornada electoral del pasado 6 de junio demostró que en México la democracia no tiene vuelta atrás. “Quienes aplicamos e interpretamos el Derecho electoral somos y seremos garantes de la democracia en nuestro país, aseguró.
Por su parte, el magistrado Indalfer Infante Gonzales advirtió que es deber de todo servidor judicial electoral, aún cuando esté sujeto a presiones ilícitas, evitar proporcionar o comprometer debates, resultados o votaciones en cualquier forma o modo, con el objeto de promover o favorecer los intereses de algún candidato partido político asociación política grupo parlamentario o ciudadano.
Al respecto, el magistrado Infante Gonzales indicó que de ahí la importancia de establecer reglas que fortalezcan la cooperación judicial, garanticen la mayor libertad para la expresión de la voluntad de quienes integramos los tribunales electorales y permitan asumir la responsabilidad de la decisión como un acto personal expresado en la votación, pero como una expresión conjunta de voluntades a partir de la decisión del colegiado.
En su oportunidad, el magistrado Felipe Fuentes Barrera manifestó que desde 1996 el TEPJF ha sido una jurisdicción especializada que determina única y exclusivamente por la vía jurídica a las y los ganadores de las elecciones, sin que sus resoluciones se vean afectadas por injerencias políticas. “No resolvemos con criterios de oportunidad política, bajo presiones, coyunturas o agendas partidistas, sino con bases objetivas e imparciales”, advirtió.
Señaló que las sentencias que emite el TEPJF buscan resolver controversias, conforme a las reglas de juego dispuestas en la Constitución y en las normas electorales, sin ninguna otra agenda más que el beneficio de la ciudadanía. “Este quehacer independiente e imparcial puede causar inconformidad en algunos actores políticos, porque no siempre entienden que la labor del Tribunal no es la de impulsar o simpatizar con un proyecto, candidatura o ideología, sino la de defender a la Constitución y proteger los derechos de la sociedad mexicana en su conjunto” puntualizó.
“Las magistradas y magistrados de Tribunal asumimos con plena entereza nuestra responsabilidad y nuestra labor independiente, aunque genere críticas y descontentos, porque entendemos que nuestra labor, como juezas y jueces constitucionales, no está orientada por la popularidad de nuestras sentencias, sino por la legitimidad que otorga el ejercer funciones con ética y sostén jurídico, siempre dentro de las facultades que nos permite la Constitución.
En su participación, el magistrado Felipe de la Mata Pizaña señaló que un tribunal actúa con independencia y autonomía cuando orienta su labor con base exclusivamente en la ley, cuando garantiza a las partes un proceso fundado en derecho, cuando lo hace sin subordinación a ninguna creencia política, presión mediática o instrucción jerárquica, interna o externa.
Indicó que la ética judicial permite orientar la única actuación de los tribunales electorales que es propia de una democracia, en toda la extensión de la palabra. “Las pautas éticas de la actuación de los jueces responden a valores tales como la imparcialidad, la objetividad o la prudencia en el despliegue de su función”, añadió.
Al hacer uso de la palabra, el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón destacó que el pasado 6 de junio el Instituto Nacional Electoral organizó con gran capacidad los comicios, por lo que ahora le corresponde al TEPJF cerrar el círculo democrático haciendo valer el Estado de derecho, mientras garantiza el principio elemental de toda democracia: contar con elecciones auténticas, libres y justas.
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