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El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) alertó que los actos violentos contra las niñas, niños y adolescentes van en aumento en el país, además de que las autoridades son incapaces de frenar esta situación.
A través del estudio Panorama Estadístico de la Violencia Contra Niñas, Niños y Adolescentes en México, el organismo informó que los homicidios de los menores de edad se han incrementado: en 2017 se registraron mil 468 casos y en 2016 habían sido mil 126.
La mayor parte de estos asesinatos se concentraron en cuatro regiones: la primera está en municipios colindantes de Sinaloa, Durango y Chihuahua; la segunda en Ciudad Juárez, Chihuahua; la tercera en los límites de Tamaulipas y Nuevo León, y la cuarta en las localidades del centro y sur de Guerrero.
Además, otro delito que ha impactado a los menores de edad son las desapariciones; en total, hasta 2017 se tenía un registro de 5 mil 790 jóvenes no localizados, 60% de las víctimas son mujeres y 40% hombres.
El representante de la UNICEF en México, Christian Skoog, aseguró que la situación más crítica se encuentra en los hogares de los niños, donde sufren agresiones físicas y sicológicas.
El informe detalla que 63% de las niñas, niños y adolescentes, de uno a 14 años, ha experimentado al menos una forma violenta de disciplina. Las agresiones más comunes son las sicológicas y los castigos severos.
La UNICEF también detectó que los hermanos o hermanas son los principales agresores, pues concentraron 28% de los casos; le sigue la madre, con 24%; el padre, con 20%; los primos, con 9%; los tíos con 6.8%, y los abuelos con 3.2%.
“La violencia que se ejerce contra los menores dentro de la casa la hemos naturalizado, la sociedad cree que no es malo darle un golpe a un niño”, explicó Christian Skoog.
Añadió que, además de la violencia en los hogares, las agresiones que reciben los jóvenes también se presentan en la escuela, su comunidad, en internet y en algunas instituciones.
Frente a esta situación, Óscar Jaimes Bello, director General de Estadísticas del Gobierno, Seguridad Pública y Justicia del Inegi, aseveró que las autoridades no tienen capacidad de respuesta porque no poseen información precisa sobre cómo y dónde se están vulnerando a las víctimas.
“Existe información estadística sobre violencia contra niños, niñas y adolescentes que permite medir de manera general algunos de los patrones más relevantes”, consideró.
Durante la presentación oficial del informe de la UNICEF también tuvieron una participación especial los representantes del SIPINNA, el DIF, ONU Mujeres y la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México.
