El representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos , Jan Jarab , dijo que las elecciones de 2018 generarán, por la coyuntura política, un aumento de “ conflictividad social que a su vez podrían provocar un aumento del riesgo que enfrentan quienes defienden los derechos humanos”.
Al participar en el reconocimiento a defensores de derechos humanos en San Salvador Atenco, organizado por el Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero, Jan Jarab indicó que se suma al llamado de los Relatores de Libertad de Expresión de tener una respuesta específica a las circunstancias que viven los defensores.
Dijo que los familiares de personas desaparecidas se han convertido en personas defensoras de derechos humanos “cuando se enfrentan a uno de los fenómenos más dramáticos que vive México hoy”.
Recordó que se sigue estigmatizando y desprestigiando a quienes ejercen la labor de defensa de los derechos y a quienes critican los poderes políticos y económicos.
Si bien destacó que hay avances legislativos, el representante del alto Comisionado para los Derechos Humanos enfatizó que las amenazas a los defensores continúan.
Explicó que los dos principales avances legislativos en materia de derechos humanos en 2017 fueron las leyes generales sobre tortura y desapariciones en las que tuvo mucho ver el trabajo de los defensores.
“No obstante, observamos como los defensores son a menudo desprestigiados y obstaculizados en su labor, siendo incluso víctimas de represalias”.
“Pero no solamente sus voces se han acallado. Se dan muchos tipos de ataques: amenazas, acoso judicial, difamación, criminalización, despojo, daño de material de trabajo, agresiones”, sostuvo.