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La empresa Barcos Caribe, ligada a los ex gobernadores priístas de Quintana Roo, Félix González Canto y Roberto Borge Angulo, tiene dos embarcaciones varadas en las costas de África que no ha podido traer a México, debido a los problemas de presunta evasión fiscal y de permisos que enfrenta.
Fuentes allegadas a la investigación aseguran que la naviera inició operaciones en 2015, con tres embarcaciones tipo Kilimanjaro de origen australiano, que compró y después rebautizó como Caribe I, II y III, las dos primeras con las matrículas 2304151221-1 y 2304151121-6.
Sin embargo, tras la detención del ex gobernador Roberto Borge, la empresa comenzó a tener problemas.
El ferry Caribe I, que explotó el pasado 21 de febrero en Playa del Carmen y que dejó 26 heridos, fue asegurado el martes por la Procuraduría General de la República (PGR) y está en custodia de la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (APIQROO).
El Caribe II, en el que supuestamente se encontró otro artefacto explosivo, está fondeado en la rada de Cozumel, enfrente de la Capitanía de Puerto.
Las fuentes consultadas señalan que el Caribe III fue suspendido por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y está fondeado al lado del Caribe II.
Indican que la empresa nació en 2012 cuando fue registrada su razón social ante fe notarial, pero fue hasta 2015 cuando Franco González Padrón (tío de Félix González Canto) y César Celso González Hermosillo y Melgarejo, supuestos socios, iniciaron las operaciones de Barcos Caribe con un capital de 200 mil pesos.
Las fuentes consultadas aseguran que en breve la PGR dará a conocer los avances que lleva a cabo en torno a la explosión del ferry Caribe I, ocurrida el pasado 21 de febrero.
