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Ante la emergencia migratoria que vive México, el gobierno federal intensificó la detención de niñas, niños y adolescentes extranjeros entre diciembre 2018 y abril 2019.
En ese periodo las autoridades capturaron a 12 mil 311 menores. Esta cifra es 24% mayor a la registrada en el último año del mandato de Enrique Peña Nieto, si se compara el mismo lapso de tiempo.
Los datos fueron obtenidos por EL UNIVERSAL a través de una solicitud de información hecha al Instituto Nacional de Migración (INM) y, según expertos consultados, reflejan la crisis que atraviesa el país en materia migratoria, así como el grado de exposición al que están expuestos los niños extranjeros cuando entran a México.
Los adolescentes de 16 y 17 años son quienes más enfrentan esta situación, pues concentran 22% de las detenciones. Sin embargo, esto no implica que bebés con menos de 12 meses de edad hayan dejado de ser capturados, pues hay 381 casos de este tipo.
De la población detenida, 92% es originaria de Honduras, Guatemala y El Salvador, mientras que el resto proviene de otras 35 naciones.
Jóvenes de Madagascar, Kirguistán, Hungría, Etiopía, Rusia, Andorra, Yemen, Nepal, Guinea, Eritrea, Pakistán, Iraq, Belice, Afganistán, Uganda, Turquía, Vietnam, Cuba, India, Angola, el Congo y Haití son los que han intentado transitar por nuestro país.
Incluso, el INM tiene registradas a seis personas de nacionalidad mexicana, aunque no se especifica por qué motivo los aseguraron.
La detención de menores de edad y su envío a las estaciones migratorias ocurre a pesar de que en enero, en una reunión para la instalación de la Comisión de Niñez Migrante y Solicitante de Refugio del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), Tonatiuh Guillén, quien renunció ayer al INM, dijo que los niños ya no serían internados ahí.
“No habrá más niños en las estaciones migratorias porque ya no rige una política de seguridad, sino una nueva de protección de los derechos humanos de la niñez y adolescencia migrantes”, afirmó.
Ese comentario fue respaldado por Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación (Segob), quien aseveró que “la política migratoria ya cambió, no que va a cambiar”.
Chiapas, con más detenidos. Son 30 estados donde han sido capturados los jóvenes, aunque Chiapas es el lugar que más casos concentra, ahí detienen a cuatro de cada 10.
Los estados que le siguen son Veracruz, con mil 736 extranjeros capturados; Tabasco, con mil 86; Oaxaca, con 881; Tamaulipas, con 717; Coahuila, con 358; Nuevo León, con 356; Ciudad de México, con 208, y San Luis Potosí, con 191.
Contrario a esto, Baja California Sur, Durango, Jalisco, Guerrero y el Estado de México son las entidades que menos casos registran.
Los cifras también revelan que 60% de los afectados son hombres y el resto son mujeres.
Entrevistados sobre este tema, expertos en migración consideraron que la detención de menores de edad debe ser frenada, porque México no cuenta con espacios para albergarlos y que se respeten sus derechos humanos.
Enrique Vidal Olascoaga, integrante del Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, describió que “las estancias migratorias son como una cárcel porque tienen vigilancia las 24 horas. Para entrar o salir hay que atravesar varias compuertas y los cuartos son como celdas con una plancha de cemento, incluso en la Estación Migratoria Siglo XXI hay celdas de castigo.
“Esto intimida al niño o la niña que lo único que desea es salir de ahí de la manera más rápida posible. Surge efecto la disuasión para que prefieran su deportación antes que otra cosa”, detalló.
La organización de Enrique Vidal, que radica en Chiapas, tiene contacto constante con los jóvenes extranjeros, quienes comentan que los albergues del DIF también poseen condiciones deplorables.
“Observamos una serie de violaciones a derechos humanos. [Los albergues] parecen centros de reclusión, están a puerta cerrada y no les permiten a los chicos salir o participar en la toma de decisiones sobre sus procedimientos”, relata.
El Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) fue propuesto por el presidente Andrés Manuel López Obrador el día de ayer para atender a esta población.
Rosalba Rivera Zúñiga, coordinadora del Área de Infancia Migrante del Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi), compartió que “tenemos un marco legal sumamente protector en México para los niños; sin embargo, tenemos aún el dilema de que no se está dando cumplimento a esas normas”.
Alertó que aunque existen procuradurías de atención para los niños migrantes, éstas son endebles: “Son instituciones muy jóvenes, empezaron a constituirse en 2015 y no tienen una perspectiva de defender derechos humanos, sino de brindar asistencia social”.
Quedan expuestos. La muerte de una niña guatemalteca de 10 años en la Estación Migratoria de Iztapalapa en la Ciudad de México es el ejemplo que utilizan los especialistas para enmarcar los riesgos a los que están expuestos los jóvenes.
Después de este hecho, el Vigésimo Primer Tribunal Colegiado concedió una suspensión para que el INM elabore un plan que evite que niños, niñas y adolescentes permanezcan en esa estación capitalina.
No obstante, organizaciones como Sin Fronteras y la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos reiteran que esa medida debería extenderse a todo el país. Otro reclamo de las asociaciones es que los extranjeros permanecen días o semanas en las estaciones migratorias, periodo en el que quedan en un limbo jurídico.
En el registro obtenido por esta casa editorial se observan al menos 948 casos en los que el INM informó la fecha de entrada de los menores de edad a una estación migratoria, pero no de su salida.