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San José.— Restaurada en 1926 por Eusebio Joaquín González, heredada en 1964 a Samuel Joaquín Flores y legada en 2014 a Naasón Merari Joaquín García, la Iglesia del Dios Vivo Columna y Apoyo de la Verdad La Luz del Mundo pasó la cúpula de mando de abuelo a hijo y a nieto de una familia mexicana de Guadalajara, Jalisco, para convertirse durante más de 93 años en un creciente emporio mundial religioso instalado en más de 55 países de los cinco continentes.
Con unos 3 mil 500 templos y más de 3 mil ministros, La Luz del Mundo aseguró tener cinco zonas de control internacional —América del Norte, Central, del Sur, Australia y España— y financiarse con aportes de sus miles de feligreses.
Por eso es que la captura de Joaquín García, de 50 años, el martes en Los Ángeles, California, por los presuntos cargos de pornografía infantil, tráfico de personas, abuso de menores y al menos otros 20 supuestos delitos, generó una conmoción global entre sus fieles, que le dicen El Apóstol de Jesucristo.
“No nos extraña la acusación. La iglesia de Cristo siempre fue sometida a estas pruebas”, dijo el abogado constarricense Gerson González, portavoz de La Luz del Mundo en Costa Rica.
“Nuestro hermano está sufriendo la misma persecución, por intolerancia, que sufrieron todos los otros apóstoles desde la iglesia primitiva”, adujo González en entrevista con EL UNIVERSAL en la sede de la iglesia, en un populoso barrio del sur de la capital costarricense y cuyo pastor jurisdiccional para 23 mil fieles es el mexicano Rogelio Rojas González.
Tras negar que sea una congregación evangélica y que aunque la fundó Jesucristo, en 1926 ocurrió su restauración cuando Joaquín González recibió una revelación y cambió su nombre a Aarón, el vocero afirmó que la iglesia “es muy sabia e instruida, con una fe muy limpia”.
El abuelo “se durmió” en 1964, por lo que su hijo heredó el mando, hasta que el también falleció en 2014 y lo legó al ahora encarcelado nieto, nacido el 7 de mayo de 1969 en Guadalajara.
“Más que director internacional, el Apóstol de Jesucristo es un hombre ejemplar que rechaza y, más bien, ataca los hechos que se le atribuyen. Sabemos que, en justicia, saldrá libre. Hacemos lo único que podemos hacer: orar, poner todo en manos de Dios. Somos una iglesia pacífica y tranquila que confía en las leyes de Dios y en las de la sociedad”, recalcó.
“Un buen cristiano es buen ciudadano”, narró, al recordar que la dirigencia de La Luz del Mundo refutó el martes la acusación que se ha hecho a su jerarca.
La Dirección de Migración de Costa Rica confirmó ayer que, con pasaporte de Estados Unidos número 49683089, el dirigente ingresó a este país el 19 de enero de 2017 y salió el 27 de ese mismo mes. “Vino a Costa Rica en gira universal”, contó.
