Volantes sin folio y cuadernos escolares
son los mecanismos que se emplean para realizar la consulta para decidir la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).
Durante la votación que se realiza a partir de este 25 de octubre, l os funcionarios de casilla solicitan al votante su credencial de elector y anotan sus datos en un cuaderno. Así ocurre en la casilla instalada en la explanada de la delegación Gustavo A. Madero.
No existe algún control para la protección de los datos
; los funcionarios no advierten a los votantes sobre si hay algún aviso de protección de datos personales, y en la cara principal de la boleta tampoco se señala algo al respecto.
La boleta está impresa en un volante tamaño media carta , en el que en la cara frontal se señalan las dos opciones posibles: reacondicionar el AICM y el aeropuerto de Toluca y construir y dos pistas en la base de Santa Lucía , o continuar con la construcción del nuevo aeropuerto en Texcoco.
Los ciudadanos que acuden a este ejercicio reciben la boleta y un marcador y tras marcar su voto, lo depositan en una urna.
Al ser cuestionados por varios ciudadanos sobre si serán respetados los resultados de la consulta, los funcionarios señalaron que se subirá una base de datos con la información, aunque no precisaron más.
cg