Norberto Rivera Carrera
nació el 6 de junio de 1942 en La Purísima, un pequeño poblado en la Sierra Madre Occidental, en el Estado de Durango. Se desempeñó como a rzobispo primado de México por 22 años.
Cursó la primaria en La Purísima; de viva voz ha contado que desde los 12 años sintió el llamado de Dios para convertirse en religioso, además de que el sacerdote José Soledad de Jesús, quien llegó a ser el primer obispo de Ciudad Obregón, influyó en su decisión. En 1955 ingresó al Seminario Conciliar de Durango, donde estudió Humanidades, Filosofía y un año de Teología.
Estudió Humanidades, Filosofía y Teología siete años en el Seminario Conciliar de Durango, y a los 20 años partió a Roma para continuar sus estudios y especializarse en Teología Dogmática en la Pontificia Universidad Gregoriana, en donde obtuvo el título de licenciado en 1966.
Fue ordenado diácono por el vicario del Papa Paulo VI, el 2 de julio de 1965, y recibió el ordenamiento sacerdotal el 3 de julio de 1966 por el Papa Paulo VI, en la Basílica de San Pedro, en Roma.
Trabajó pastoralmente de 1967 hasta 1985, año en que fue nombrado obispo de Tehuacán y su consagración tuvo lugar el 21 de diciembre, de manos de Antonio López Aviña, arzobispo de Durango.
El 13 de junio de 1995 fue designado como el 34 sucesor de Fray Juan de Zumárraga y el cuarto de arzobispo primado, custodio de la tilma de San Juan Diego.
Tras los sismos de 1985, logró la restauración de la Catedral Metropolitana como el monumento artístico más importante de América Latina.
Como cardenal le tocó recibir a tres papas: Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco.
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