El próximo gobierno de México debe hacer de la protección a periodistas una prioridad en su agenda, dijo Javier Esteinou Madrid, profesor distinguido de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
El académico y periodista señaló que en su agenda, el gobierno federal debe garantizar el ejercicio pleno del derecho a la información y la suspensión del uso de los medios públicos como instrumentos al servicio de los gobernantes.
“La prioridad debiera ser la salvaguarda de la vida de periodistas porque en la medida que se sacrifica a los comunicadores, se refuerza el modelo de pensamiento único”, señaló el fundador de la Unidad Xochimilco.
Propuso incrementar el presupuesto a los medios públicos para compensar el desequilibrio con los medios privados; además de apoyar su autonomía e independencia de gestión, de manera que no sean utilizados como instrumentos a favor de los regímenes, sino que sirvan a la sociedad y estén abiertos a la libertad de expresión.
El académico del Departamento de Educación y Comunicación de la unidad Xochimilco, dijo que es necesario recuperar derechos como el acceso a la información, de réplica, y de las audiencias, y la posibilidad de expresar libremente el pensamiento y la opinión.
“Tendríamos que preguntarnos si el partido político que gane las próximas elecciones estaría dispuesto a lograr esto, porque hemos visto que usan la comunicación para crear una buena imagen de su desempeño”.
Lamentó que las voces críticas, independientes y autónomas sean “amenazadas, perseguidas, despedidas y, si eso no fuera suficiente, desaparecidas y asesinadas (...) vivimos una etapa delicada respecto de la libertad de expresión y de pensamiento y, por tanto, de agresión a la democracia”.
Dijo que el gobierno prometió reglamentar el gasto oficial en publicidad, pero en el quinto año del sexenio un grupo de la sociedad civil demandó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación el cumplimiento de esa responsabilidad al Poder Ejecutivo.
El asunto está en discusión, pero los planteamientos de las autoridades están orientados a mantener el control que permita un gasto excesivo en propaganda, con el fin de mejorar su imagen en esta fase electoral.
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