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Los gatos son unas de las mascotas más populares en todo el mundo. Su suave pelaje y su reconfortante ronroneo los hace grandes compañeros.
Sin embargo, a pesar de lo tiernos y divertidos que pueden ser, vivir con ellos implica hacer ciertas adecuaciones al estilo de vida de los dueños, puesto que su curiosidad los hace propensos a causar cierto nivel de caos.
Tal es el caso de la época navideña , la cual es conocida por los dueños de gatos como una época en la que hay que estar muy al pendiente del comportamiento de los mininos para evitar accidentes, especialmente con el árbol de Navidad .
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La rivalidad entre gatos y árboles de Navidad
La combinación entre gatos y Navidad suele dar como resultado la inevitable destrucción del árbol navideño. Si bien el caos que causan los felinos podría sugerir que odian la Navidad, lo cierto es que quizás sean sus más grandes admiradores.
Como menciona el portal Catster, donde nosotros vemos un árbol de Navidad , los gatos ven un rascador gigante, lleno de ramas para trepar y un arsenal de juguetes listos para ellos. Desde la perspectiva de un gato, un árbol de Navidad es un área de juegos sin igual, así que se vuelve un objeto irresistible cuyo atractivo incrementa al ser un objeto único que sólo ven una vez al año.
La naturaleza gatuna los hace querer explorar todos los recovecos que estén a su alcance por lo que es irresistible para ellos interactuar con los árboles de Navidad, que, para colmo, están adornados con objetos que parecieran ser los juguetes perfectos para nuestros mininos al estar colgados como si fueran obsequios esperando por ellos.
El problema con esto es que la atracción que sienten los gatos por todos los objetos coloridos y brillantes que decoran el árbol, además del olor y las ramas, es que puede ocasionar accidentes en donde el daño el árbol pasa a segundo plano.
Los peligros de los árboles de Navidad en la salud de los gatos
Si bien nuestros ánimos navideños se rompen cuando vemos nuestro árbol destruido por el lado salvaje de nuestros gatos, es necesario tener presente que los árboles de Navidad representan un grave peligro para la salud de los mininos.
De acuerdo con Better Homes and Gardens, aunque la mayoría de los árboles de Navidad no son tóxicos para los gatos si solamente se restriegan contra ellos o los rasguñan, si los felinos muerden o comen sus hojas o savia, o beben del agua del árbol, pueden desarrollar problemas de salud.
Las hojas de pino no pueden ser digeridas por los gatos y, peor aún, pueden perforar sus intestinos, además de que el pino es altamente tóxico para los gatos y puede causarles desde daño hepático hasta la muerte .
En este sentido, los árboles artificiales son una opción un poco más segura para una casa donde se tienen este tipo de mascotas, aunque esto no significa que sean inmunes a la destrucción por parte de los felinos. Además, hay que recordar que tampoco son en absoluto buenos para el medio ambiente y hay que tomar en cuenta que si los gatos ingieren el plástico al morderlo, también pueden poner en riesgo su salud .
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¿Cómo hacer un árbol de Navidad a prueba de gatos?
Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA) emitió recomendaciones para proteger a los árboles de Navidad de la destrucción felina que a la vez ayudarán a mantener a tus gatos a salvo.
Una opción es optar por un árbol de menor tamaño para evitar que llame demasiado su atención y se sientan atraídos hacia él e incluso lo ataquen. Al ser más pequeño y en caso de caer por la invasión gatuna, habrá menos probabilidad de que el árbol rompa otros objetos de la casa o que incluso aplaste al gato. Además, tiene la ventaja de que es más fácil y rápido decorar un árbol pequeño.
Así mismo, PETA sugiere que en lugar de decorar el árbol inmediatamente al llegar a casa, le des tiempo a tu gato de inspeccionarlo y aburrirse de él . De esta manera, la curiosidad del gato será menor cuando te dispongas a decorar el árbol y habrá menos probabilidad de que lo destruya debido al exceso de estímulos.
Por otro lado, es de suma importancia que el árbol tenga una base sólida . Debes de dar por hecho que tu gato va a saltar o trepar al árbol, en cuyo caso, vale la pena asegurarse de que el árbol pueda mantenerse en pie por seguridad de todos.
También puedes colocar el árbol lejos de zonas que tu gato pueda usar para saltar a él , de modo que se le dificulte hacer acrobacias extremas que representen un riesgo.
Además, PETA sugiere que utilices la aversión de los gatos al papel aluminio y a los olores cítricos a tu favor. Puedes cubrir la base del tronco con papel aluminio y colocar cáscaras de limón o naranja cerca de la base para ahuyentar a tu gato cuando no resista la curiosidad de acercarse al árbol.
Al momento de decorar, es importante colocar los adornos a una altura de difícil acceso para tu minino, de lo contrario, deberás resignarte a la posibilidad de que los tiren constantemente y los rompan por jugar con ellos.
De igual forma, es necesario evitar colocar las luces en la parte externa de las ramas para no darle tentaciones a los gatos. Es mejor colocarlas más hacia el centro de las ramas de modo que sigan adornando el árbol pero sin llamar demasiado la atención de los felinos.
PETA también recomienda ser cuidadoso con el tipo de adornos navideños que se eligen al tener gatos, pues muchos materiales pueden ser altamente tóxicos para tus mascotas y otros, como las velas o esferas de vidrio, pueden causar accidentes fatales. También vale la pena alejarse de decoraciones con cierto tipo de comida que es dañina para los gatos, como el chocolate, o plantas que son tóxicas para ellos, como las nochebuenas o el muérdago .
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