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Un popote tarda en degradarse hasta cien años, su uso lleva apenas unos minutos en los que se termina la bebida; una bolsa de plástico puede descomponerse hasta en 150 años, y tan sólo se utilizó para transportar o envolver productos. Frente al uso efímero de estos materiales, especialistas pidieron regular su consumo y aumentar el reciclaje con el fin de evitar la contaminación.
Las imágenes de masas de plástico flotando en los océanos y videos de animales marinos atrapados en bolsas de este material o con popotes incrustados en el cuerpo han dado la vuelta al mundo.
En México se generan al año 43 millones de toneladas de residuos sólidos, los cuales provienen de los productos consumidos en los hogares, tales como restos de comida, envases, paquetes y embalajes; cada día se producen 117 mil toneladas de basura, lo que equivale a que en el país una persona genera un kilo de deshechos diarios, según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Jorge Carlos Hurtado Valdez, subsecretario de Fomento y Normatividad Ambiental de la Semarnat, destacó que de las 117 mil toneladas diarias de basura alrededor de 12% son residuos de plástico. Detalló que de las 43 millones de toneladas de residuos sólidos sólo se recicla 9.76%.
En cuanto al consumo de los popotes, estimó que cada mexicano utiliza dos de estas piezas a la semana, al año se ocupan 49 mil 700 toneladas en total.
“Esto equivale a toda la basura generada por 45 mil familias de 3 integrantes. Estamos tratando de convencer a los establecimientos a no dar de manera automática el popote, y hacer conciencia entre la gente para que no solicite este producto”, subrayó.
De cara a la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, este 5 de junio, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) lanzó una campaña en redes sociales para cambiar los plásticos por productosreutilizables, para combatir la contaminación de estos materiales.
Con el juego Por un Planeta #SinContaminaciónporplástico, el organismo de las Naciones Unidas convocó a los usuarios de redes sociales a comprometerse a dejar de consumir plásticos e invitar a tres amigos a sumarse, los cuales deben responder en las siguientes 24 horas.
Prohibición “voluntaria”. La Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos establece que los estados y municipios deberán emitir los lineamientos para la recolección y disposición final de los residuos sólidos generados en los hogares. El subsecretario de la Semarnat consideró que evitar el uso de plásticos debe hacerse de manera voluntaria a través de campañas educativas donde se informe sobre los daños de este material a la flora y fauna.
“Estamos tratando de convencer a la gente, como parte de la campaña de reducir el uso de los popotes, no es obligatorio que lo eliminen, pero estamos tratando de convencer, que no los usen. Buscamos aliados con cines, restaurantes, en los espectáculos para evitar el consumo de popotes. Estamos prohibiendo poco a poco, haciendo conciencia con supermercados para que dejen de usar la bolsa de plástico y usen la ecológica”.
El 21 de mayo la Semarnat lanzó la campaña “Sin popote está bien”, con la cual se busca concientizar a la población sobre el impacto en la biodiversidad que tienen los popotes, los mensajes de la campaña destacan el uso efímero de los popotes en contraste con el tiempo que tardan en degradarse, hasta cien años o más.
Falta regulación de plásticos. Dolores Barrientos Alemán, representante en México del PNUMA, resaltó que a nivel mundial falta regular el consumo de plásticos, así como políticas públicas que sensibilicen a la población sobre los daños que generan estos materiales a los ecosistemas; llamó al gobierno mexicano, a las empresas y a la sociedad a replantear el uso de estos productos, con el fin de buscar alternativas sustentables, como cambiar las bolsas de plástico por unas de manta.
“El tema de prohibir el plástico es muy nuevo, la ONU está empezando con acciones voluntarias como las adhesiones y compromisos que fueron llevados en esta campaña de mares limpios. El llamado que hace Naciones Unidas tanto a nivel global como a nivel nacional, es que todos los sectores sean conscientes del impacto negativos del plástico”, dijo.
Advirtió que cada año 13 millones de toneladas de este material terminan en los mares, de continuar con este patrón de desperdicio para 2050 habrá en los océanos más basura que peces.
Detalló que los plásticos tardan mucho tiempo en degradarse: los platos y vasos de unicel tardan 50 años en descomponerse, los pañales y botellas les lleva 450 años, mientras que las redes de pesca 600.
“La gente piensa que por degradarse ese material se va desintegrando hasta desaparecer pero no es así, sino que se va haciendo más pequeño hasta convertirse en micro particulas de plástico, las cuales afectan la salud de las especies marinas porque las ingieren y al final del día como nosotros nos alimentamos de ellos, también ingerimos esas partículas de plástico”, subrayó.
Datos del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) señalan que en los últimos 50 años se multiplicó 20 veces la producción mundial de plásticos, cerca de 320 millones de toneladas en ese lapso, de las cuales 8 millones llegaron a mares y océanos, éstas se hundieron, se quedaron flotando o estacionados en las playas.
El consumo de este producto ha ocasionado la muerte de un millón de aves y cerca de 100 mil mamíferos marinos de 600 especies, además de tortugas marinas en todo el mundo, de acuerdo con las cifras que se dieron a conocer en la Conferencia sobre los Océanos 2017.
Para Emilia Marín, coordinadora de Áreas Marinas Protegidas del Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) es necesario un marco regulatorio que obligue a las empresas a reducir el consumo de plasticos para los embalajes, si bien no retirarlo de tajo, pero tratar de reducir su uso de manera paulatina, por lo que podría establecerse un impuesto o incluso sanciones.
“Necesitamos reducir el consumo del plástico, cualquier embalaje trae como 3 o 4 envoltorios de plástico para proteger al producto y estos terminan en la basura”, planteó.
Comentó que regular el consumo de este material es urgente, puesto que desde hace 50 años comenzó su uso desmedido.
“Es alarmante porque , estos plásticos acaban en ríos, bosques, en el mar, no hay un reciclaje correcto es importante enfocarse en estos dos puntos: bajarle al consumo y aumentar el reciclaje, aprovechar estos deshechos”, advirtió.