El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Ernesto Cordero Arroyo (PAN), manifestó que el Senado de la República participa en las acciones que realizan tanto el Estado como la sociedad civil para sacar adelante a las familias que perdieron su patrimonio durante los sismos de septiembre pasado.

Implica la reparación emocional, requerida para contar con la fortaleza para superar la crisis y que el país siga avanzando, dijo Cordero Arroyo al inaugurar la exposición “Niños de Morelos, Visión Pictórica de los Sismos”, producto del taller Reconstrucción Emocional, realizado por la fundación Escuelas Ocurrentes.

La exposición que permanecerá en el Mottor Lobby de Senado hasta el 17 de noviembre, muestra pinturas en las que niñas, niños y adolescentes manifiestan su perspectiva de cómo superar la tragedia.

La presidenta de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), la priísta Ana Lilia Herrera Anzaldo, destacó que las acciones de la sociedad civil y autoridades permiten promover los valores y una ciudadanía más comprometida.

“México es capaz de sacar, a partir del dolor, lo mejor de su población”, expuso y añadió que “la reconstrucción de los estados afectados por los sismos será posible gracias a los mejores valores de la sociedad, como la solidaridad, perseverancia y rectitud”.

Héctor Sulaimán, presidente de las Escuelas Ocurrentes de México, indicó que se vive la etapa de reconstrucción e implica la reparación emocional, de ahí que se haya establecido el programa especial para enseñar a pintar a los niños y que pudieran expresar los sentimientos provocados por los terremotos, a fin de que los superen y alcancen nuevamente la tranquilidad.

“Estos murales representan el dolor, el miedo, en general, todos los sentimientos que sacaron los niños y jóvenes desde lo más profundo de su corazón, y dejarlos ahí para reparar su espíritu. Esto es tan necesario como la reconstrucción de todo lo destruido por los sismos”, señaló.

Expresó que lograr proyectar los sentimientos que vivieron durante y después de los temblores, permite entender cómo cada persona participa en la unidad de México, y esto facilita la reconstrucción.

Las niñas Carla Lugo e Iliana Barrera comentaron cómo a través de la pintura lograron expresar sus emociones, junto con la perspectiva de superar la tragedia, de ahí que hayan plasmado una rosa que renace tras ser partida por un rayo, o un barco que les permite navegar protegidos durante la tormenta. Redacción

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