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Los niños que se quedaron sin clases por los sismos de los pasados 7 y 19 de septiembre deben regresar cuanto antes a la escuela para que recuperen su normalidad, afirmó la organización Save the Children.
La organización estimó que alrededor de 5.3 millones de niñas y niños mexicanos no han podido regresar a las aulas tras los fuertes terremotos que sacudieron al país.
Tras el temblor del 7 de septiembre que afectó Oaxaca y Chiapas, además de los otros dos sismos del 19 y 23 de septiembre, que afectaron a 10 estados, resultaron dañadas un total de 2 mil 424 escuelas, de las que 577 necesitan ser reconstruidas por completo y mil 847, de forma parcial.
Datos del Banco Mundial refieren que en México, una vez que los niños han sido sacados de la escuela, inclusive sólo por una conmoción temporal, tienen 30% menos probabilidades de seguir con su educación, comparadas con las de niños que permanecen en la escuela.
María Josefina Menéndez Carbajal, directora ejecutiva de Save the Children en México, enfatizó que la coordinación entre gobierno, sociedad civil y sector privado es una prioridad, a fin de asegurar el derecho a la educación de los menores.
“Es importante que la reubicación de los alumnos en otras escuelas, así como el establecimiento de aulas temporales se lleven a cabo en el menor plazo posible para que los niños más vulnerables recuperen su normalidad”, enfatizó.
