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Organizaciones no gubernamentales protestaron en la glorieta de la columna de la Independencia contra la empresa Monsanto, por considerar que amenaza con contaminar y desaparecer el maíz nativo, que pertenece al patrimonio, identidad, alimentación y soberanía nacional, además de acusarla de atentar contra la vida, la libertad y la biodiversidad en el mundo.
Yaxel López Villa, una de las organizadoras, declaró que la manifestación se organizó a nivel internacional contra la compañía y se unieron “varios espacios de jóvenes estudiantes, campesinos y organizaciones de derechos humanos”.
Comentó que su principal exigencia es que las transnacionales salgan del país, “porque lo que están haciendo es privatizar las semillas”. Añadió que tienen varios pronunciamientos, por ejemplo, de compañías argentinas afectadas por Monsanto.
Decenas de ciudadanos que apoyan el movimiento se unieron para apoyar la marcha contra la compañía. Mariana Ortega y Azul Cielo sostenían pancartas con la leyenda: “Fuera Monsanto. No más veneno para nuestros niños”.
Ortega declaró que protestaban “por la crisis del maíz en la producción de la tortilla y contra los pesticidas que usa la agricultura industrializada”. Esas problemáticas, aseguró la manifestante, afectan a quienes consumen lo que se produce en el agro.
