Si la familia está en crisis, la sociedad también, por ello es necesario fortalecerla, puesto que es el núcleo de la nación, aseguró el obispo Carlos Samaniego , quien ofició la misa dominical en sustitución del arzobispo Carlos Aguiar Retes.
Desde el altar mayor de la Basílica de Guadalupe , el religioso lamentó el incremento de divorcios, separaciones, violencia intrafamiliar y la falta de deseo en las nuevas generaciones por tener hijos.
"Si la familia está en crisis, la sociedad también y la vemos manifestada en divorcios, separaciones, en la gran cantidad de uniones de hecho, en la violencia intrafamiliar y el aborto. La sociedad no desea hijos, no los recibe y una familia no solo debe desearlos sino recibirlos, el drama del aborto aparece, y una generación que mata a sus hijos no tiene futuro" resaltó.
Carlos Samaniego invitó a los fieles católicos a descubrir los valores que deben regir a las familias para darles estabilidad , puesto que de lo contrario, cualquier viento las derribará.
"La estabilidad de las nuevas familias a veces solo se basa en atracción física, acoplamiento sexual o económico y no por amor, entonces vendrá cualquier viento y las va a derrumbar, pero cuando están fundamentadas en amor, hay un compromiso total que toma en serio la relación y hace sólidas sus bases"
Señaló que la familia conformada por María, José y Jesús es el ideal para los hogares en el que la mujer debe ser la prioridad del hombre, el cual se debe poner en segundo plano a sus amigos o el fútbol y en el caso de las mujeres, privilegiar al marido sobre sus padres, hijos, cosméticos y redes sociales.
"La familia ha de ser fecunda, que dé vida, donde también se hable del respeto de unos con otros, donde prevalezca el perdón y la ternura de dios. Superar la crisis que vive la familia y como consecuencia la sociedad es necesario seguir ese modelo ideal, y crear una pequeña comunidad, no solo hacer la suma de individuos de una manera egoísta".
Agregó que a la crisis de la familia se suman la ideología de género con la idea de legalizar el matrimonio y adopción homosexual. "Ante esta situación, la iglesia nos presenta a la sagrada familia como modelo para nuestras familias, un modelo que tiene como contenido el amor".
Durante las oraciones, el obispo auxiliar pidió a la feligresía elevar una súplica "para que el señor mantenga en paz y armonía a todas las familias mexicanas".