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La activista y lingüista ayuujk Yasnaya Elena Aguilar, originaria de la Sierra Norte de Oaxaca, subió a la tribuna de la Cámara de Diputados durante la sesión ordinaria de este martes, donde acusó que fueron las políticas públicas del Estado mexicano las que por años influyeron para la desaparición de las lenguas indígenas, porque solo al español se le dio el valor de “la lengua del Estado”.
Su participación se da como parte de las actividades del Año Internacional de de las Lenguas Indígenas, entre las que cada martes un orador de algún pueblo originario hace uso de la tribuna. Este martes se presentó la activista de San Pedro y San Pablo Ayutla Mixe.
“Fue México el que nos quitó nuestras lenguas, el agua de su nombre nos borra y nos silencia. Aun cuando han cambiado las leyes, estas continúan siendo discriminadas dentro de los sistemas educativo, de salud y del judicial.
“Nuestras lenguas no mueren, las matan. El Estado mexicano las ha borrado. El pensamiento único, la cultura única, el Estado único, con el agua de su nombre, las borra”, sentenció.
En sus palabras dirigidas a los legisladores federales, la escritora aseguró que en la desaparición de las lenguas también se contabilizan golpes, regaños y discriminación a los pueblos indígenas por el hecho de hablar su lengua materna, sobre todo, en el sistema escolar.
“¡Tu lengua no vale!, les dijeron repetidamente. ¡Para ser ciudadano mexicano necesitas hablar la lengua nacional, el español!, ¡Deja de usar tu lengua!, insistieron”.
Aguilar resaltó que las mayorías se convirtieron en minoría con el paso de los años, al tiempo que recordó el hecho de que México es un país cuyo nombre es la evolución de una palabra en lengua originalmente indígena.
“Hace 200 años se estableció el Estado que ahora se llama México. Después de 300 años de la conquista de los españoles, en 1820, 65% de la población hablaba una lengua indígena. El español era una minoritaria en ese entonces.
“En la actualidad, los hablantes de lengua indígena somos 6.5%, el español es ahora la lengua que han convertido en dominante. Hace 2 siglos, el náhuatl, el maya, el mayo, el tepehua, el tepehuano y el mixe eran las mayoritarias”, expresó.
Aguilar aseguró que la desaparición de las lenguas originarias “se trató de un proceso impulsado desde las políticas del gobierno y se les quitó el valor en favor de una lengua única: el español”.
“A nuestras lenguas las matan también cuando no se respetan nuestros territorios, cuando las venden y concesionan, cuando asesinan a quienes las defienden. ¿Cómo va a florecer nuestra palabra en un territorio del que se nos despoja?”, añadió.
Entre los motivos de las muertes de las lenguas destacó el papel que el Estado Mexicano ha jugado en las violaciones de los derechos de hablantes de lenguas indígenas. En particular, denunció que su comunidad, un pueblo hablante de la lengua ayuujk o mixe, lleva casi dos años sin acceso al agua potable debido a que un grupo armado los despojó del acceso al manantial que históricamente les ha proveído de agua.
Aguilar Gil enfatizó que a pesar de haber presentado las pruebas suficientes no se ha hecho justicia y su comunidad se encuentra al borde de una crisis por la violación del derecho humano al agua, que por omisión de las autoridades no ha sido resuelta, dejando a los miembros de su comunidad, especialmente a las personas de la tercera edad y a la población infantil, en un alto estado de vulnerabilidad.
Desde 2017 pobladores de San Pedro y San Pablo Ayutla han denunciado que grupos armados en complicidad con funcionarios del municipio aledaño de Tamazulapam Mixe, los despojaron del manantial que les daba agua potable, además de que destruyeron la infraestructura hidráulica de la comunidad. Incluso fueron atacados con armas de fuego el cinco de Junio del 2017, lo que dejó un saldo de siete heridos y una persona asesinada.