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justiciaysociedad@eluniversal.com.mx
Con técnicas de mapeo cerebral y cirugía con paciente despierto fueron atendidos 19 derechohabientes con tumores cerebrales en los últimos 18 meses en el servicio de Neurocirugía del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI.
Con este procedimiento se busca preservar la función del lenguaje o movimiento, mientras se reseca el tumor, detallaron los especialistas.
Bayron Alexander Sandoval Bonilla, médico de esa unidad del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explicó que un tumor cerebral puede alterar funciones vitales o las conexiones con el resto del cerebro, por lo cual se ofrecen dos tipos de cirugía con paciente despierto para encontrar la función específica que está en riesgo.
Con el mapeo cerebral, el pronóstico de vida dependerá del tipo de tumor que se trate. Si es benigno, la cirugía es curativa con extirpación total; si es maligno, el objetivo es reducir el tamaño del tumor para que el paciente tenga mejor calidad de vida.
Los tumores malignos se presentan en personas de 50 a 65 años de edad, en tanto que los benignos y las malformaciones vasculares son más frecuentes entre los 25 y 45 años, sin prevalencia de género en ambos.
La primera alternativa quirúrgica consiste en dormir al paciente e intubarlo con un dispositivo especial. Una vez que el tumor cerebral está expuesto, se despierta al paciente para hacer el mapeo y detectar el área afectada por la protuberancia. Al terminar se aplica anestesia para cerrar los tejidos.
La segunda opción de tratamiento se realiza sin intubación y bajo diversos grados de sedación al paciente, se ubica el tumor e identifican las zonas del cerebro donde las funciones pueden estar en riesgo.
El especialista precisó que en ambas técnicas el cirujano estimula el cerebro aplicando corriente eléctrica limitada y regulada, mientras el paciente realiza una tarea dirigida por el neuropsicólogo y anestesiólogo. De acuerdo con la reacción del paciente al estímulo (movimiento o ausencia de éste, respuesta verbal o ausencia de ésta), se marca cada área funcional sobre la corteza cerebral.