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El conflicto laboral que mantiene cerrada la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) no tiene visos de resolverse en el corto plazo luego de que la universidad rechazó nuevamente incrementar su propuesta salarial para acercarse a la demanda del Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM (SITUAM). La organización laboral ya había reducido su expectativa de obtener un incremento salarial de 20% a 10%.
Ayer, una veintena de trabajadores sindicalizados irrumpió en una conferencia de prensa presidida por el secretario general de la universidad, José Antonio de los Reyes Heredia, en un hotel del centro de la CDMX.
Los trabajadores no lograron ingresar en el salón donde se llevaba a cabo el evento; sin embargo, sí obligaron a la rectoría a terminar antes y a sacar a de los Reyes Heredia por la cocina para evitar una confrontación.
“Hacemos responsable de que este conflicto siga, a la universidad: no es que el sindicato no haya sido flexible. Está en las manos de la universidad la posibilidad de resolver este conflicto”, dijo Abigail Pamela Gómez Suárez, trabajadora de la Rectoría General.
Los trabajadores argumentaron que el incremento salarial que demandan se podría obtener de reducir en 50% las compensaciones y estímulos salariales que perciben los funcionarios de mandos unipersonales, como los rectores, secretarios generales y abogado general de unidad y de la UAM.
Por ejemplo, en el caso del rector general, Eduardo Peñalosa Castro, los trabajadores demandan que percibe 259 mil 798 pesos mensuales; el secretario general percibe más de 245 mil pesos; mientras que el abogado general, Juan Rodrigo Serrano Vásquez, tendría un ingreso superior a los 180 mil pesos.
"El presupuesto para incrementar el salario de los trabajadores puede salir de sus exorbitantes salarios o de las compensaciones y estímulos que ellos se pagan y no se quieren bajar absolutamente nada. Si ellos se redujeran en 50% estos bonos y estímulos en un presupuesto que ellos se han autoasignado, podrían darle una salida al conflicto del propio sobresueldo que se han estado pagando", dijo Gómez Suárez.
El sábado, la reunión conciliatoria entre sindicato y Rectoría nuevamente terminó sin acuerdos por el tema salarial: los trabajadores demandaban el pago de 100% de los salarios caídos durante la huelga, y la UAM ofreció pagar 50%; los trabajadores ofrecieron ajustar su expectativa de incremento salarial a 10% en todos los puestos y para todos los trabajadores administrativos de base y un ajuste de 3% para todos los trabajadores académicos, en lugar del 20% que habían demandado desde un principio, la Rectoría señaló que no era posible.
El domingo en conferencia de prensa, el secretario general, José Antonio de los Reyes Heredia, dijo que la huelga ha tenido un costo de 30 millones de pesos en pérdidas para la institución, en términos de los proyectos de investigación, muchos proyectos tenían compromisos calendarizados, con fondos externos que se han visto interrumpidos sus protocolos de investigación con alumnos de posgrado y licenciatura que participan.
“Estamos previendo tener un apoyo institucional a aquellos alumnos cuya beca concluya con Conacyt pero que pudieran ser apoyados por la institución. Las afectaciones materiales en términos económicos ya ascienden a más e 30 millones de pesos de lo que requieren muchos proyectos de naturaleza experimental", dijo.
Señaló que no hay manera de ofrecer un incremento mayor a lo que planteó la institución desde el principio en las mesas de trabajo: "No podemos ir más allá de un incremento que hemos propuesto si no sería comprometer seriamente las funciones sustantivas de la institución", dijo.
Adelantó que la Rectoría General planteará una reducción general en los ingresos de primer nivel, tanto en salario como en compensaciones y estímulos pero rechazó exponer la propuesta con detalle al señalar que la misma se dirigirá al Colegio Académico una vez que este pueda sesionar.
El funcionario rechazó que la Institución sea responsable del alargamiento de la huelga, “más allá de lo que le compete en cuanto a hacer un ofrecimiento que no comprometa su viabilidad financiera y que permita garantizar el desarrollo de sus actividades sustantivas”.
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