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En México, la pérdida promedio anual de superficie forestal arbolada pasó de 190 mil 400 hectáreas por año, en el periodo 1990 a 2000, a 91 mil 600 hectáreas, en el periodo 2010 a 2015 de acuerdo con la Evaluación de los Recursos Forestales Mundiales (FRA, por sus siglas en inglés), publicada cada cinco años por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Al inicio de esta administración, el gobierno de la República se comprometió a reforestar un millón de hectáreas, meta que ha alcanzado un 88.5% de cumplimiento con 884 mil hectáreas reforestadas.
Para atender el problema, la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) operan el Programa de Combate a la Tala Clandestina y el Programa Nacional Forestal (Pronafor) con la participación de cada una de sus delegaciones en los Estados, realizando acciones que han permitido obtener resultados cualitativos y de alto impacto a favor del medio ambiente.
Las acciones contra la tala se orientan principalmente a la inspección y vigilancia de la cadena productiva en materia forestal (aprovechamiento, transporte, transformación y almacenamiento de materias primas forestales) de la que se derivan diversos ilícitos ambientales.
En 2016 y en lo que va de 2017, la Profepa ha realizado 5 mil 195 inspecciones, 977 recorridos de vigilancia y 456 operativos forestales.
Con estas acciones, se ha logrado clausurar 146 aserraderos, así como el aseguramiento de 48 mil 849 metros cúbicos de madera, 518 vehículos, 847 toneladas de carbón vegetal, mil 86 herramientas y equipos, y se ha puesto a disposición del Ministerio Público Federal a 99 personas.
Por ello, la Conafor y Profepa fortalecen su compromiso de garantizar la conservación, protección y el cuidado de los recursos forestales mediante las actividades de inspección y vigilancia para verificar el estricto cumplimiento de la normatividad ambiental aplicable.
Según el FRA, México ocupa el lugar 11 en la lista de países con mayor superficie de bosques y selvas; y el lugar 63 en la lista de porcentaje de tasa de deforestación.
La Comisión Nacional de Seguridad y la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) suscribieron un convenio de colaboración para la creación de un grupo denominado Gendarmería Ambiental, a fin de coadyuvar en la protección de las Áreas Naturales Protegidas.
La Gendarmería Ambiental ha conseguido el decomiso de poco más de 3 mil metros cúbicos de madera en todo el país. También se cuenta con el apoyo de la Secretaría de Marina (Semar) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en las labores de protección de los bosques en México.
Reportes de la World Wildlife Fund México indican que la actuación coordinada de la Gendarmería Ambiental y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, desarrollaron tareas de inspección y vigilancia en la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca que disminuyeron en 94% la tala clandestina.
Entre mayo de 2016 y febrero de 2017, la degradación de bosques en esa Área Natural Protegida que abarca tres estados de la República mexicana, se redujo 78% respecto a las 72.3 hectáreas afectadas en 2015-2016.
En este último periodo, se degradaron 15.8 hectáreas de bosques de las cuales .65 fueron afectadas por tala clandestina, 13.8 hectáreas resultaron dañadas por la caída de árboles por los vientos de la tormenta del 9 de marzo de 2016, y 1.35 por sequía.