Aunque las autoridades en teoría cuentan con las herramientas tecnológicas para reducir la incidencia de robo de vehículos, éstas son desaprovechadas, por lo que la tendencia continuará al alza, expone Lucía Almaraz, investigadora de la Universidad del Valle de Atemajac.
“He insistido en que la mayor problemática que tenemos en Jalisco no sólo en robo de vehículos, sino en todos los delitos, es la falta de inteligencia policial, pues teniendo la herramienta ésta no es utilizada”, dice.
Explica que la fiscalía ya cuenta con un centro de inteligencia, pero no funciona porque los analistas carecen de capacitación o falta de perfil. Además, las bases de datos para los cruces de información son obsoletos, no están vigentes o tienen datos desactualizados. “No se hace un verdadero análisis de la información, sino que sólo se hace una captura de datos”, afirma la investigadora.
También se requiere redireccionar las labores de inteligencia para que se cuente con personal que trabaje exclusivamente en la prevención del robo a vehículos, puesto que el problema es que las investigaciones son para resolver sólo los delitos.
“Entonces, se atienden las carpetas de investigación, pero no se atiende el fenómeno de robo de vehículos como tal”, precisa.
Así, al utilizar correctamente las herramientas de inteligencia se puede reforzar el patrullaje en las zonas identificadas de mayor incidencia para montar operativos específicos.