justiciaysociedad@eluniversal.com.mx
La Iglesia católica consideró que el dinero que se usa en precampañas y campañas políticas es “un dispendio abrumador” que debería destinarse a las comunidades que resultaron afectadas por los sismos del 7 y 19 septiembre pasado y criticó que no exista una verdadera austeridad con respecto a estos gastos.
A través del editorial publicado en el semanario religioso Desde la fe, lamentó que las fuerzas políticas sólo hayan destinado 380 millones de pesos a la reconstrucción del país, puesto que “sólo sirvieron de arenga populista electorera, mientras el derroche continúa sin escuchar el clamor público que demandó de los partidos políticos una verdadera austeridad, no sólo apariencias”.
El texto argumentó que después de los sismos, organizaciones de la sociedad civil demandaron de los partidos políticos la renuncia total a sus prerrogativas y financiamiento público con la finalidad de que estos recursos se destinaran a la reconstrucción y reactivación económica de las regiones azotadas —las cuales aún continúan en rehabilitación—, así como a la asistencia de los miles de damnificados.
Como respuesta, los institutos políticos respondieron a través de iniciativas y discusiones para renunciar a montos en el último trimestre del año 2017.
El 22 de diciembre, el Instituto Nacional Electoral (INE) hizo público el documento Informe Respecto de la Renuncia al Financiamiento Público por los Partidos Políticos Nacionales, en Virtud de los Sismos del Mes de Septiembre de 2017, en que se detalla cuáles fueron los partidos, además de los montos para ser destinados a los diferentes fondos de desastres.
Según este documento, sólo cinco partidos políticos entregaron recursos económicos de sus prerrogativas correspondientes a octubre, noviembre y diciembre de 2017. La suma hasta diciembre ascendía a más de 380 millones de pesos, que incluyen montos por actividades ordinarias y específicas. Sólo un partido político renunciaría a 30 millones de pesos en enero, mientras que los demás no hicieron referencia de entrega de recursos para 2018.
El informe proporcionado por el INE, reveló que esos 380 millones de pesos deben reintegrarse a la Tesorería de la Federación; “sin embargo, 380 millones de pesos son insuficientes para las grandes urgencias que todavía padecen muchas comunidades pobres”.
La Iglesia concluyó que describir estas cantidades no era una situación ociosa, “sino que se trata de demostrar que no se ha dado una verdadera voluntad política para renunciar efectivamente, y en un porcentaje suficiente, a fin de ayudar a la reconstrucción que necesita más de 14 mil millones de pesos”.
Al presidir la homilía dominical en la catedral metropolitana, el cardenal Norberto Rivera Carrera pidió a los fieles católicos orar por los responsables políticos de todo el mundo, en especial por aquellos que tienen a su cargo la economía, “para que encuentren alternativas a la difícil situación que se vive en muchas ciudades y entre sus soluciones contemplen a los más pobres y desfavorecidos.