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La imagen de Frida, perra labrador de la Unidad Canina de la Secretaría de Marina (Semar) que desde los sismos de septiembre pasado se volvió una celebridad en redes sociales, no sólo ayudará a encontrar cuerpos entre toneladas de escombros, sino también lo hará con la tecnología por medio de una App que pretende que en medio de situaciones difíciles se pueda avisar a familiares que el usuario se encuentra en buen estado.
Esto es posible gracias a la aplicación Frida 1.0, desarrollada por Javier Alejandro Torres Reyes, ingeniero radicado en la delegación Iztapalapa, la cual está diseñada con el fin de enviar un aviso “a tus seres queridos y personas que te importan ante una situación difícil o de peligro para hacerles saber que estás bien, así como tu ubicación”.
Para encontrar la herramienta, se tiene que ingresar al portal de aplicaciones de Google y se selecciona Frida 1.0 y enseguida se descarga la app de manera gratuita.
En la descripción de la herramienta se detalla que esto ahorra tiempo y esfuerzo.
En el segundo ícono titulado se incluye un acceso directo para marcar al 911, que es donde se concentran los números de emergencia.
Hasta el momento, la App sólo está disponible para teléfonos inteligentes que utilicen el sistema operativo Android y ya ha sido descargada por al menos 50 personas.
Frida, de ocho años de edad, ha participado en labores de búsqueda y rescate durante tragedias ocasionadas por fenómenos naturales como en los temblores de Haití, en 2010; en Ecuador, el año pasado; en el deslave de un cerro en Guatemala, en 2015, así como en los pasados sismos del 7 y 19 de septiembre en México.
Sabueso inteligente. En las acciones de búsqueda y rescate en los edificios colapsados por el temblor del 19 de septiembre pasado la imagen de esta labrador se volvió muy popular en redes sociales, así como la comercialización de su imagen, la cual apareció en mochilas, calcomanías, playeras, peluches, llaveros y hasta en cervezas.
La popularidad de la perrita rescatista llegó hasta Japón, donde la han apodado cariñosamente “Marina-Chan”, por la etiqueta de la Secretaría de Marina en el chaleco que suele llevar puesto, y agregándole el sufijo chan, un diminutivo japonés que significa “afecto”.
Frida nació en 2009 en las instalaciones de la Unidad Canina, donde se selecciona a ejemplares que cuentan con las características necesarias para participar en el rescate y localización de personas en fenómenos naturales como sismos o deslaves.