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La Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM) ha sobrevivido 83 años y tres transiciones porque su fuerza está en las bases y no es una creación del poder político, dijo su líder Carlos Aceves de Olmo .
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero advirtió que se terminaron los sindicatos de Estado, y que ya no habrá más dirigentes sindicales apoyados por el gobierno.
En una reunión que estuvo llena de aplausos, porras, vivas y abrazos la organización obrera vinculada al Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde su creación, refrendó como su signo la "adaptabilidad".
"Algunas de las razones por las que estamos aquí: la CTM ha sobrevivido 83 años y tres transiciones porque su fuerza viene de abajo hacia arriba; no es una creación del poder político sino una manifestación social del poder que unidos tenemos los trabajadores", dijo el dirigente sindical.
"El signo de nuestra organización es la adaptabilidad: pueden cambiar los tiempos pero no nuestros principios. México ha visto pasar liderazgos efímeros y liderazgos fuertes; a los primeros los debilita el tiempo, a los segundos, el tiempo los congrega en la CTM ", agregó Aceves del Olmo .
Con la presentación de la Sonora Dinamita y un Auditorio Nacional que no alcanzó a llenarse, la Confederación de Trabajadores Mexicanos (CTM) celebró el 83 aniversario de su fundación.
Ante ese auditorio, la Secretaria de Gobernación , Olga Sánchez Cordero reconoció el liderazgo del también senador Aceves del Olmo y la importancia de la organización sindical; trajo la figura de Lázaro Cárdenas como iniciador de la central obrera y como imagen institucional de la Cuarta Transformación
"Igual que ustedes, también somos cardenistas", dijo ante una audiencia que la interrumpía constantemente para gritar porras a favor de Aceves del Olmo ; pero entre los abrazos y los elogios dirigidos a quien consideró su amigo, también enfatizó que en la administración de Andrés Manuel López Obrador se acabaron los sindicatos apoyados por el gobierno.
"Nuestra vocación democrática es absoluta. Como lo ha dicho nuestro presidente: ya no va a haber dirigentes sindicales apoyados por el gobierno, no va a haber sindicatos del gobierno, ni apoyados por las autoridades. Se terminan los sindicatos de Estado. Los sindicatos van a tener independencia y libertad", dijo.
El líder sindical, quién recordó que se acerca a cumplir 80 años de edad, dijo que: "le deseamos éxito (al gobierno federal) en lo que favorezca a los mexicanos. En algunas cosas pensamos distinto pero siempre hay forma de llegar a acuerdos".
En referencia a las declaraciones del senador Napoleón Gómez Urrutia , quién creó su propia central obrera, dijo que "a los viejos se les respeta".
"Hoy los periódicos hacen una reseña que nos hemos convertido en los fósiles, que estamos atrasados.
Ya quisiera yo que algunas organizaciones que tratan de entrar fuerte pero que no tienen gente, que tienen mucha cola que les pisen, nos andan molestando y por eso tenemos muchas huelgas en Matamoros. No hay quejas del gobierno de que hagamos marchas, pintarrajeemos la paredes y rompamos cristales. No es nuestro estilo. Nos gusta negociar pero nos gusta más trabajar por la gente y darles resultados. Toda esta gente que está aquí no están acarreados, ni se les dio un bono. Vinieron porque quisieron venir y se trajeron sus camiones", señaló.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón , dijo que la única manera para salir de la pobreza es el empleo puesto que no hay ninguna otra manera "sustentable" para lograrlo. Pidió un "sindicalismo moderno" y dijo que empresarios y trabajadores forman parte del mismo engranaje.
"La historia nos ha demostrado que los salarios no aumentan por decreto. La única vía de desarrollo está en la inversión juntos. Nunca en la perversa manipulación. México requiere del trabajo de todos y cada uno de nosotros. Pongamos manos a la obra para que nuestro país siga cambiando, generación tras generación para bien. Defendamos el mejor empleo".
Mientras que la senadora Beatriz Paredes consideró que la CTM y las centrales obreras van a tener que hacer un "enorme esfuerzo" de renovación, formación de sus dirigentes e interlocución con el Estado y el Poder Judicial. Es una nueva etapa en el mundo laboral mexicano.
"Esta nueva etapa no puede, con motivo de la democratización, anarquizar al movimiento obrero y debilitar al sindicalismo mexicano. Si necesitamos enriquecer nuestras banderas, hagámoslo pero eso es pretexto para debilitar a las grandes centrales obreras de nuestro país", dijo
Al referirse a la nueva reforma laboral que plantea el gobierno federal, señaló que los senadores del PRI , están dispuestos a negociar, razonar y a entender argumentos.
"A lo que no estamos dispuestos a arroddillarnos y a confundir la necesaria modernización del mundo sindical con una disputa artera, sin decir la verdad, que no pretende defender a los trabajadores sino simplemente desplazar a las organizaciones que han merecido los contratos y la confianza".
mcp
