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politica@eluniversal.com.mx
El secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Javier Jiménez Espriú, aseguró que desde el pasado 27 de diciembre oficialmente está suspendida la construcción del aeropuerto en el lago de Texcoco y que se ha empezado la negociación con los distintos contratos para darlos por terminados anticipadamente.
En Palacio Nacional, acompañado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, el funcionario federal recordó que luego de la recompra de los bonos de la terminal aérea se dio la instrucción de comenzar con la cancelación de los contratos.
“El jueves 27 [de diciembre pasado] se creó el Consejo de Administración del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México.
“En vista de que ya se había resuelto el problema de los bonos, se dio instrucciones al director [del recién creado consejo] de iniciar la cancelación, terminación o negociación de los respectivos contratos”.
Aseguró que una vez que se solucione el tema de la Fibra E, la cual se había obtenido por mil 500 millones de dólares, darán un informe pormenorizado al respecto.
En dicho informe, dijo, las autoridades explicarán qué pasaba en el aeropuerto, cómo se hicieron las cosas en la obra areoportuaria, en qué situación se encontraba la construcción y “cuál hubiera sido el futuro de la edificación del aeropuerto en el lago de Texcoco si se hubiera tomado la decisión de continuarlo”.
Jiménez Espriú rechazó que la recompra de bonos pueda considerarse como un NAIMproa.
“Se ha especulado que estamos pagando un NAIMproa. No. La compra de mil 800 millones de dólares significa que la deuda que el gobierno anterior había conseguido, se disminuyó; o sea, se devolvieron mil 800 millones de dólares a un banco, porque no se pudieron ejercer”.
El funcionario señaló que de los 6 mil millones de dólares que se debían, ya nada más se adeudan 4 mil 200. La idea, aseguró, es que cada año se disminuya en unos 200 millones de dólares esa deuda.
Recordó que después de dar a conocer el resultado de la consulta nacional en la que se decidió mantener la actual terminal aérea y construir dos pistas más en el aeropuerto militar de Santa Lucía, “se planteó que no podíamos tomar una decisión sobre la cancelación de los contratos, sino hasta que se resolviera el tema de los bonos financieros.
“Se dijo que en el momento en que se resolviera esto podíamos cancelar ya, tomar la definición de la cancelación que había el señor Presidente dicho, que se haría en función de lo que decidió el pueblo”.
Afirmó que hoy era el límite planteado para la adquisición de los bonos, pero no se tuvo que esperar, porque el 26 de noviembre se logró la aceptación de la venta de los mil 800 millones de dólares.