La comunidad LGBTTTI respondió al conductor Mauricio Clark que son gays, lesbianas y trans, pero que no están enfermos, por lo que no necesitan una cura ni trapia de conversión para ser heterosexuales, luego de que el comunicador revelara que "se curó" de su homosexualidad.
Decenas de tuiteros respondieron con sus logros y descripciones para rechazar que necesiten "curarse", pues no están enfermos.
Hasta una cuenta que simula ser Sor Juan Inés de la Cruz se metió en el debate.
Por eso, hace días a través de su cuenta de Twitter, Mauricio dio a conocer su acercamiento a la Cienciología, acción que le fue muy criticada en las redes sociales, donde la hacían ver que esa doctrina veía a la homosexualidad como una enfermedad.
Sin embargo, la declaración originó críticas de los conductores Pedro Sola y Alejandra Ley.
Incluso el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) reiteró que las terapias de conversión son una forma de violencia y discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género.
“En los últimos días han saltado algunos sucesos acerca del funcionamiento y efectividad de las terapias de conversión, desde Conapred expresamos una postura, con base en la Constitución mexicana y la Declaración Universal de Derechos Humanos, las terapias de conversión son una forma de violencia y discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género y transgreden los derechos al libre desarrollo de la personalidad, a la salud, a la integridad personal y a la igualdad y no discriminación”, afirmó.
Explicó que de acuerdo con la Asociación Americana de Psiquiatría (APA), la orientación sexual se descubre alrededor de los 10 años de edad y ésta se refiere a la capacidad de cada persona de sentir una atracción erótico afectiva por personas de un género diferente al suyo, de su mismo género o de más de un género.
cg