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A sus 12 años, Gabriela Sarahí se convirtió en la primera niña en recibir un trasplante de médula ósea en Torreón, Coahuila. Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) 71 le trasplantaron células troncales de su hermana de cinco años.
En noviembre pasado, la niña originaria del ejido El Pilar, en Matamoros, presentó sarpullido y fiebre, su mamá la llevó al Hospital General de Subzona (HGSZ) número 20 de Francisco I. Madero y después al Hospital General de Zona (HGZ) número 18, donde se consideró la posibilidad de que padeciera leucemia.
Para realizar un diagnóstico acertado, fue trasladada a la UMAE número 71, donde fue atendida por la hematóloga pediatra Mayra Patricia López Montejo, quien explicó que luego de realizarle diversos estudios, se concluyó que padecía anemia aplásica, condición en la que su cuerpo no produce suficientes células sanguíneas, como son glóbulos rojos, blancos y plaquetas.
Para reducir los riesgos de infecciones y sangrados fue aislada el 11 de diciembre y se le sometió a distintos procedimientos, en los que se separó un virus sospechoso de la anemia aplásica y se suministraron antibióticos e inmunodepresores, sin mejora en la condición de la niña.
Al no tener buenos resultados con los tratamientos, se decidió el trasplante de médula ósea, y se inició el protocolo de búsqueda para poder ser intervenida a la brevedad.
Una de sus dos hermanas resultó compatible para el trasplante, una menor de 5 años, por lo que en febrero se le extrajeron células progenitoras hematopoyéticas de la médula ósea para infundirlas a la paciente en cuanto estuviera preparada para la operación.
“El riesgo de anemia e infecciones era alto y si no se hubiera hecho el trasplante, probablemente la paciente hubiera fallecido. La anemia aplásica es un padecimiento mortal”, detalló la hematóloga pediatra López Montejo.
Después de la cirugía se mantuvo aislada a la niña para asegurar que no hubiera rechazo y reducir el riesgo de un cuadro infeccioso. Se le practicó un estudio en el Centro Médico Nacional La Raza para conocer si las células se implantaron en el organismo receptor. El resultado fue que Gabriela Sarahí tenía 100% de las células de su hermana.
Francisco Javier Rosales Hernández, jefe de Onco-Hematología de la UMAE número 71, comentó que fue el primer trasplante infantil de médula ósea en Coahuila y que la evolución ha sido bastante favorable.
Gabriela Ibarra Carrillo, madre de las dos niñas, agradeció el apoyo del instituto y de todo el equipo que participó en la intervención y tratamiento de su hija.
“Nosotros pensábamos que era una leucemia. Primero sí estuvo muy duro porque [a Sarahí] la mantuvieron aislada, no se le bajaban las temperaturas y con el tratamiento fue reaccionando muy bien, hasta que la intervinieron para transplantarle la médula ósea”, relató.
La niña fue dada de alta recientemente, luego de permanecer tres meses en aislamiento con permanente vigilancia del equipo multidisciplinario del Seguro Social, con la finalidad de asegurar el éxito del implante y su pronta recuperación en cama.
