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Los niños de las comunidades afectadas por las inundaciones y el sismo del 7 de septiembre no perderán el ciclo escolar, aseguró el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Aurelio Nuño.
En estos momentos, dijo, hay 200 mil estudiantes que no están en clases, puesto que la infraestructura de las escuelas no está en condiciones para recibirlos.
En conferencia de prensa, el funcionario presentó la estrategia para retomar clases en las comunidades cuyas escuelas aún no se han podido recuperar o que necesitarán ser reconstruidas.
La estrategia consiste en trasladar temporalmente a los niños a otras escuelas, construir aulas provisionales, las cuales estarán listas en los próximos 15 días. Las autoridades locales decidirán si dar clases en fines de semana, a contraturno o durante las vacaciones, señaló.
“Era una inquietud de muchos papás, que si esto va a llevar a perder el ciclo escolar, y lo que decimos es que no, que estamos en condiciones de recuperar el ciclo (...) No se perderá y las estrategias para recuperar los días perdidos en las escuelas que tienen daños mayores, las tendrán que determinar las autoridades locales”, dijo.
Por el sismo de 8.2 grados que el pasado 7 de septiembre afectó con mayor gravedad en el sureste del país, dos mil 678 escuelas resultaron con algún tipo de daño en las dos entidades: mil 72 en Oaxaca y mil 606 en Chiapas; mientras que 262 tuvieron daños graves: 86 en Chiapas y 176 en Oaxaca. Con daños medios hay mil 445 escuelas y con afectaciones menores, 927.
La rehabilitación o reconstrucción de estos planteles podría tardar hasta ocho meses.
En el censo que ha levantado la SEP, a las escuelas se les pintó en las fachadas los números de folio de atención; el funcionario esperó que para el miércoles todos los inmuebles estén censados.
En caso de que alguna autoridad educativa considere que hay algún otro plantel con daños, deberá reportarlo al número 01 800 288 6688 de la dependencia federal, para que se integre al padrón de atención.
Explicó que brigadas con ajustadores de seguros recorren los planteles, y estimó que la semana próxima iniciará la demolición y posterior reconstrucción de las escuelas con afectaciones estructurales; la SEP pagará directamente a las aseguradores para evitar burocracia. Si se necesitan reparaciones menores, se entregará directamente el dinero a maestros y padres de familia, quienes administrarán los recursos.
Hasta el momento, se plantea una bolsa cercana a los dos mil millones de pesos para rehabilitar las escuelas: a través de las aseguradoras se tendrán mil 800 millones de pesos; hay un fondo de 70 millones para reparaciones menores y unos 200 millones de pesos serían del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).
