A su llegada como nuevo Arzobispo Primado de México, Carlos Aguiar Retes tiene la tarea de reimpulsar la acción misionera de diálogo, testimonio y acción”, se consideró en un artículo publicado en el semanario religioso Desde la Fe.
En el texto se asegura que el cardenal debe “cultivar las vocaciones, apacentar una realidad dinámica y plural, una iglesia en crecimiento, boyante e interpelada por la ebullición de una sociedad más crítica”.
Resaltó la necesidad de la autorreflexión para hacer más eficiente la tarea evangelizadora .
“El cardenal Aguiar Retes será el pastor capaz de gobernar y apacentar no por sus propias capacidades sino por ser conocedor de que esta Arquidiócesis requiere de la suma de los más notables talentos y del trabajo dedicado de los agentes de evangelización involucrados en la Misión Permanente , que permite la renovación de los propósitos del II Sínodo”.
En lo social, el Arzobispo Primado de México enfrentará las polarizaciones de un territorio que es el centro económico del país, “que se encuentra agobiado por la pobreza y la marginación; por la proliferación de nuevos cultos religiosos y por una entidad política donde se aplican disposiciones legislativas que van contra la dignidad de la vida y de la familia”.
Se destacó que la Arquidiócesis de México es un lugar de desafíos y retos; una iglesia de esperanza en un país plural anhelante de un futuro más prometedor, en donde se respeta la dignidad de todas las personas; hogar de casi ocho millones de católicos.
La publicación recordó que hace 22 años, el Obispo de Tehuacán, Norberto Rivera Carrera , llegó para hacer frente a esos mismos desafíos y para introducir a los fieles hacia el tercer milenio de la era cristiana. “Dos décadas de luces, sombras, de llevar la Cruz y las pruebas que azotan a la Iglesia en medio de las tensiones del mundo moderno”.
La restructuración y organización pastoral de la Arquidiócesis comenzó desde tiempos del siervo de Dios, Luis María Martínez y fue continuada por los Arzobispos Miguel Darío Miranda, Ernesto Corripio Ahumada y Norberto Rivera Carrera, "esta no debe quedarse en huecos propósitos mientras la sociedad exige respuestas y razones válidas de fe que justifiquen por qué creer en el cristianismo”.
"El Arzobispo emérito de México tuvo esta oportunidad de servir a pesar de los muchos ataques e incomprensiones, entre polarizaciones y reconocimientos que le valieron el aprecio y cercanía de los últimos pontífices, subrayó el artículo".
La designación del cardenal Carlos Aguiar Retes continúa con esta tónica definida desde el II Sínodo Arquidiocesano. Es urgente la acción evangelizadora para encarnarse en las culturas de la Ciudad de México.
Desde el semanario religioso agradecen a Norberto Rivera Carrera “por la amplia libertad que el Arzobispo emérito de México dio a este semanario para interpelar e iluminar la realidad a la luz del Evangelio y de la doctrina social de la iglesia”.
Al tiempo manifiestan “con gozo y esperanza”, esa misma confianza al cardenal Carlos Aguiar Retes, “quien ha sido llamado a ser puente y conducir esta iglesia particular en los vínculos de la caridad y la misericordia, desde donde irradian los cambios más profundos que repercuten en el futuro de la nación mexicana”.
lsm