El representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Jan Jarab , y dos oficiales de derechos humanos de esa oficina realizaron una misión de trabajo en Nuevo Laredo, Tamaulipas , con el objetivo de participar en una mesa de trabajo con autoridades y familiares de víctimas de desaparición y ejecuciones extrajudiciales en esa ciudad, “ para alcanzar acuerdos y avanzar en soluciones ante la grave situación que se vive en la localidad”.
En la mesa de trabajo participaron el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Rafael Avante, así como con miembros de la Unidad de Derechos Humanos de la Segob; el fiscal Especializado de Búsqueda de Personas Desaparecidas, Abel Galván; el comisionado Nacional de Búsqueda, Roberto Cabrera, y el segundo visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Enrique Guadarrama.
En el encuentro también se contó con la presencia de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas y de la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en el estado de Tamaulipas.
Jarab expuso cuatro dimensiones que deben ser atendidas: la búsqueda, particularmente con vida; la investigación de los hechos y sanción a los responsables para evitar la impunidad; la protección de las familias y testigos, en un contexto de amenazas que algunos de ellos han recibido, y las garantías de no repetición de ese tipo de hechos.
“La desaparición es uno de los retos más grandes de México; esta ola reciente de desapariciones en Nuevo Laredo se ubica entre las más preocupantes, se trata de un caso emblemático en su conjunto,” añadió el representante en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Manifestó la voluntad de la ONU-DH para seguir cooperando con las autoridades mexicanas, su respaldo al trabajo del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo y una profunda empatía con las familias de las víctimas, a quienes la oficina seguirá acompañando.