justiciaysociedad@eluniversal.com.mx
Ansiedad, angustia, desesperación, insomnio, fatiga crónica, desgano, falta de concentración, aumento en el consumo de alimentos, bruxismo (acto involuntario de rechinar los dientes) y enfermedades cardíacas son algunas consecuencias físicas, sicológicas y de comportamiento provocadas por el estrés, afirmaron expertos.
Norma de Jesús Yépez García, del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, explicó que situaciones como tránsito, exámenes, tiempo, dinero, relaciones interpersonales, enfermedades, inseguridad, trabajo, imprevistos, el futuro y hasta el peso corporal constituyen factores estresantes que pueden deteriorar la salud a nivel físico o sicológico.
“El estrés es una respuesta física, emocional o mental ante una situación física, sicológica o social. Nuestro organismo busca el equilibrio, pero cuando algo sale de control y enfrentamos un problema, o cuando las estrategias que usamos generalmente no funcionan, entramos en un momento de crisis. Ese desequilibrio genera estrés”, aseguró.
Agregó que pensar de forma negativa sobre diversas situaciones cotidianas también repercute a nivel fisiológico, cognitivo y conductual, y consecuencias como problemas gastrointestinales, colitis, gastritis, taquicardia, mayor consumo de alimentos, de cigarrillos o de bebidas.
Roberto Rodríguez, especialista de cirugía maxilofacial del Servicio de Estomatología del Hospital General de México Eduardo Liceaga, comentó que la ansiedad y el estrés pueden causar padecimientos como el bruxismo, que se presenta en 60% de los adultos de 30 a 59 años de edad.
“Es un padecimiento en adultos jóvenes con síntomas como dolores de cabeza, muscular y de cuello, molestias en el oído, mareos, desgaste de los dientes y rigidez, el bruxismo no se erradica, sólo se controla”.
William Zoghbi, presidente del Departamento de Cardiología del Houston Methodist DeBakey Heart and Vascular Center, aseguró que las situaciones estresantes prolongadas pueden desencadenar inflamación y factores de riesgo de desarrollar enfermedad cardiaca.
“El estrés por sí solo no causa enfermedades cardiacas, pero estudios recientes muestran que puede causar inflamación que afecta a los vasos sanguíneos. Esta inflamación puede provocar ataques cardiacos, derrames cerebrales y otros problemas de salud”, afirmó.