Las llamadas telefónicas que están haciendo los servidores de la nación a los adultos mayores para conocer si desean vacunarse contra el Covid, son parte de una estrategia político-electoral y una promoción del gobierno federal, al manifestar que antes “daban despensas, ahora dan vacunas”, consideraron académicos y especialistas.

En entrevista con, consideraron que estas llamadas son similares a las que realizan partidos políticos en campañas electorales para promover candidatos, y alertaron que se debe tener mucho cuidado con la información que se entrega, puesto que esto puede ser la puerta de entrada para robos u otros delitos en contra de los adultos mayores.

El pasado 18 de enero, el presidente anunció la formación de 10 mil brigadas Correcaminos para inmunizar a adultos mayores, que estarían compuestas por 10 funcionarios federales, entre ellos integrantes del sector Salud y de las Fuerzas Armadas, y dos servidores de la nación.

Luis Carlos Ugalde, exconsejero presidente del extinto Instituto Federal Electoral (hoy INE), aseguró que la participación de los servidores de la nación en la campaña de vacunación contra el Covid podría prestarse a un uso electoral de cara a los comicios intermedios de 2021, pues detalló que además se debe tomar en cuenta que estos funcionarios son intermediarios entre el Presidente y el pueblo.

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“Siempre existe la tentación de que le digan a los vacunados que eso es gracias al gobierno de la 4T y que por lo tanto deben votar a favor de Morena, ese riesgo es muy grande en una situación como la pandemia, en donde la gente está muy vulnerable y siente que el gobierno es su salvador gracias a la vacuna.

Sin vacuna, siervos de la 4T sondean a adultos mayores
Sin vacuna, siervos de la 4T sondean a adultos mayores

El director de Integralia expuso que no está claro el papel que tendrán los servidores de la nación en la campaña de vacunación, más bien parece un ejercicio de proselitismo y clientelismo, agregó Ugalde Ramírez.

Mauricio Merino Huerta, doctor en Ciencia Política por la Universidad Complutense de Madrid, aseguró que es evidente que los servidores de la nación son usados en la campaña nacional de vacunación contra el Covid-19 con fines electorales.

“Las brigadas Correcaminos a todas luces no corresponden con un plan de vacunación. El gran problema es que no tenemos ni la más pálida idea de cuál es el plan de vacunación, cuándo llegará, dónde asistir, a quién le toca, no sabemos nada. Lo único que sabemos es que hay personas reco- rriendo el país, que ya lo han hecho para repartir programas del gobierno con evidentes propósitos electorales”, externó.

Precisó que esta práctica no es exclusiva de la 4T, sino una muy arraigada en el sistema de partidos, pues explicó que “es lo mismo que hemos visto por décadas, estas personas previo a las elecciones recorren las casas, antes daban despensas, frijol con gorgojo, así decía López Obrador como opositor, y daban láminas, cobijas, ahora dan promesas de vacunación o programas sociales con tarjetas del Bienestar, pero no hay la más mínima diferencia”, detalló Merino Huerta.

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En este mismo sentido, Edgar Ortiz Arellano, politólogo y académico de la UNAM, señaló que estas llamadas recuerdan a las que hacen todos los partidos políticos en épocas electorales para promover candidatos, puesto que el Poder Ejecutivo tiene el control total de las dosis.

“Estas llamadas nos recuerdan las estrategias que utilizan los partidos políticos para promover a candidatos, esta estrategia hace eco a estas prácticas que todos los organimos utilizan en los últimos años, pero ahora es en el caso de la vacuna Covid”, subrayó.

Llamadas pueden abrir la puerta a la delincuencia

Ugalde Ramírez alertó que existe el riesgo que criminales usen chalecos cafés y se hagan pasar por servidores de la nación y las personas les abran la puerta pensando que serán vacunados.

“Existe ese riesgo, por supuesto, ese es un problema, lo que habría que exigirle al gobierno es que publique la lista de quiénes son los servidores de la nación que participan en el plan, de cada brigada, en dónde van a trabajar, y de manera semanal debería publicarse el nombre de quién ya recibió la vacuna. Eso sería un verdadero ejercicio de rendición de cuentas, pero lo veo muy difícil que ocurra”, puntualizó.

Javier Oliva, especialista y profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, consideró que se debe tener mucho cuidado en la forma en que se comunica a los adultos mayores y se obtienen sus datos personales, puesto que, si no se tienen elementos de seguridad, esta información podría caer en manos de la delincuencia.

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“Los adultos mayores no deben informar el número de personas con las que viven y sus horarios de trabajo, pues son datos que a ellos les sirven. Se debe tener mucho cuidado, sobre todo porque son un sector vulnerable a ser víctima de delitos”, precisó.

A consulta de EL UNIVERSAL, la Secretaría de Salud (Ssa) informó que las respuestas que den los adultos mayores son muy importantes para planear esta campaña de vacunación; sin embargo, puso énfasis en que el servidor que llame debe dar su nombre completo, preguntar si le interesa vacunarse contra el Covid y si puede acudir al punto de aplicación.

Aseguró que nadie puede pedir dinero o datos bancarios, y recordó que todos los trámites relacionados con la vacunación contra el Covid son gratuitos.