La Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado acordó la conclusión de los trabajos y desaparición de la comisión especial para determinar la existencia de abusos de autoridad y violaciones en Veracruz, con el fin de desactivar el conflicto interno de Morena, luego de que la mitad de sus integrantes la calificaran como ilegal.

El presidente de la Jucopo, Ricardo Monreal, rechazó que represente una derrota, pues seguirá luchando por los derechos, pero reconoció que era necesario atender los reclamos de sus compañeros.

“No debo involucrar a todo el grupo, debo reconocer que hay diferencias (…) voy a continuar defendiendo a las víctimas y voy a seguir el asunto de [José Manuel] del Río.

“No voy a declinar en mi propósito de justicia para Veracruz y para otros estados que padecen arbitrariedades”, señaló al salir de una reunión con otros líderes.

Admitió que por primera vez su bancada no lo acompañó en el tema de Veracruz, lo que considera una decisión respetable, pero equivocada: “Los espacios en política se llenan, y esta bandera era nuestra. La lucha por los humillados, por los desprotegidos, por los más vulnerables, era nuestra esencia”.

Se mostró decepcionado de la actitud adoptada por el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, quien ha acusado de ilegal la comisión.

“Pensé que iba a actuar con más mesura. Siempre al funcionario que lo acompaña la arrogancia y la soberbia no termina bien. (…) Le recomendaría que abandonara la arrogancia y la soberbia y que intentara ayudar, corregir, ayudarle a la gente”, dijo.

Insistió en que la comisión especial fue constituida en diciembre pasado de forma totalmente legal, de acuerdo con derecho parlamentario.

“Lo ilegal es detener arbitrariamente, lo ilegal es perseguir, desaparecer personas, subordinar al Legislativo y al Judicial y a la fiscalía en un solo ente”, recriminó.

Por otra parte, Monreal Ávila negó que su cargo al frente de la bancada de Morena haya estado en riesgo por este conflicto interno, pues reveló que, incluso algunos de los 30 senadores que habían firmado la convocatoria para reunirse este viernes, lo llamaron por teléfono para deslindarse de cualquier intento de destituirlo.

Informó que los 90 casos de violaciones graves en Veracruz, que habían sido documentados por la comisión especial, serán turnados a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y a las comisiones de Gobernación y de Derechos Humanos del Senado.

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